Golpeó salvajemente a su hijastra de solo un año y dos meses de nacida y le causó la muerte, pero David Jesús Basilio Cueva, de 26 años, asegura estar arrepentido tras crimen ocurrido en Trujillo.
“Estoy arrepentido… Me nublé”, dijo Basilio Cueva cuando era trasladado a la sede central del Ministerio Púbico en esa ciudad.
Al ser consultado si el día que golpeó y asesinó a la menor había ingerido bebidas alcohólicas o drogas, el cobrador de transporte público respondió que no y que tampoco profesaba alguna religión o creía en Dios.
Su pareja y madre de la bebe, Lorena Aguilar Aguilar, intentó en todo momento taparse el rostro y no declaró.
Un conocido suyo, sin embargo, contó en la delegación policial que la mujer era constantemente golpeada y amenazada por el criminal.