Pese a vivir en un albergue de damnificados, niños de Piura sí reciben clases

La huelga de maestros no afectó a los escolares damnificados por el fenómeno de El Niño costero que viven en el albergue San Pablo, ubicado en el kilómetro 980 de la carretera Panamericana Norte, en Catacaos (Piura).

Alrededor de 127 niños siguen recibiendo clases con normalidad, pues los cinco docentes (tres de primaria y dos de secundaria) no se han plegado a la huelga indefinida de maestros.

La directora del colegio, Shirley Izaga Morán, explicó a El Comercio que no pueden paralizar las clases, pues empezaron tarde debido a El Niño costero. “Acá comenzamos el 8 de mayo, y estamos retrasados. Tenemos que recuperar clases, por eso ningún docente ha acatado la huelga. Seguimos con nuestras clases normales, y la asistencia de alumnos es al 100%”, dijo.

Agregó que los niños reciben desayuno del programa estatal Qali Warma; y los docentes son capacitados por la ONG Plan Internacional. “Estamos avanzando porque, como te digo, por las lluvias y el desborde del río perdimos muchas horas de clase. Gracias a Dios ya estamos saliendo adelante”, dijo mientras los niños realizaban sus tareas.

El albergue San Pablo es uno de los refugios donde se alojan miles de damnificados que perdieron sus viviendas y pertenencias por el desborde del río Piura, ocurrido hace cuatro meses. El colegio del lugar es de triplay y los techos de calamina. Los alumnos que estudian allí viven en carpas junto a sus familias.

Solo en Piura, El Niño costero dejó 91.835 damnificados, 310.570 afectados, 17 fallecidos, 39 heridos, 4 desaparecidos, 5724 viviendas colapsadas, 8469 viviendas inhabitables y 71.008 viviendas afectadas. También afectó 711 instituciones educativas y 195 centros de salud en toda la región.

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