Madre de Dios
Lourdes Fernández Calvo

Solo en lo que va del año la policía ha rescatado a 258 víctimas de trata de personas e intervenido a 82 presuntos tratantes en las zonas de incidencia de este delito: La Pampa, Delta 1 y Mazuko, en Madre de Dios

El jueves último, El Comercio acompañó a unos 90 agentes de la Dirección Contra la Trata de Personas de Lima que llegaron hasta Mazuko (Madre de Dios), donde impera la explotación sexual y laboral.

Los policías llegaron como agentes encubiertos a los conocidos 'prostibares' que están ubicados a lo largo de la Carretera Interoceánica. En cinco de ellos, pudieron encontrar a dos menores de edad que habían llegado a la zona desde el Cusco a través de engaños y falsas ofertas de trabajo.

Según la policía, uno de los problemas a los que se enfrenta al realizar estas operaciones, además de la falta de personal, es que las víctimas reconozcan que lo son y se acojan al programa de rescate del Ministerio de la Mujer. "Nosotros las rescatamos, les explicamos que son explotadas, pero ellas deciden si reciben la ayuda", precisa uno de los agentes.

Cuando son menores de edad, las víctimas son transferidas directamente a un albergue del MIMP.

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