Piuranos abarrotaron cementerios en el Día de Todos los Santos

Los 95 años que carga a cuestas don Anastasio López García no han sido impedimento para que acompañe a sus familiares al cementerio Campo de Paz, en el Medio Piura. Allí ha dejado flores y muchas oraciones a su ex yerno José Godos, difunto que descansa en ese camposanto.

Como él, miles de piuranos acudieron desde tempranas horas a los cementerios, a coronar y rezarle a sus familiares fallecidos en el Día de Todos los Santos. 

El Comercio realizó un recorrido por varios camposantos y comprobó que la concurrencia fue masiva desde la mañana. Los piuranos acudieron al cementerio Metropolitano, al San Teodoro, al cementerio Jardínes Celestiales, Camposanto Mapfre de Piura (Campo de Paz), Parque del Recuerdo, entre otros. En todos estos lugares la policía nacional desplegó varios contingentes policiales y restringió algunas calles aledañas para evitar congestión y mantener el orden. 

En el cementerio Metropolitano fue común ver a las familias reunidas en torno a la tumba de sus difuntos, almorzando juntos. En otros casos les rindieron homenaje con mariachis y músicos que ofrecían sus servicios dentro de los cementerios. Las autoridades de Salud fumigaron días previos estos lugares para evitar la propagación del temible dengue. 

Por la noche las familias piuranas velan a sus muertos y los acompañan durante toda la madrugada. En zonas del Bajo Piura se ofrece roscas de muerto y angelitos a los más pequeños. Esta tradición busca recordar a sus seres queridos, sobre todo a aquellos que partieron muy pequeños aún. Los niños comen dulces y miel en honor a los párvulos que partieron. 

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