Así lució el expresidente Alejandro Toledo, quien es requerido por la justicia peruana. (Foto: Reuters)
Así lució el expresidente Alejandro Toledo, quien es requerido por la justicia peruana. (Foto: Reuters)
Paolo Benza

La justicia de Estados Unidos ha determinado que el expresidente continúe detenido mientras dure su proceso de extradición.

Al momento de dar a conocer su veredicto, terminada la audiencia que se celebró este viernes en San Francisco, el juez Thomas S. Hixson mencionó dos argumentos como principales para sustentar la decisión: que cuando Toledo fue arrestado, el FBI encontró US$40.000 escondidos en una maleta en su casa y que, si el expresidente llegara a escapar, se trataría de un “fracaso diplomático significativo” para Estados Unidos.

Como argumentos iniciales para ratificar la detención, la fiscal federal Elise LaPunzina indicó que Alejandro Toledo “no tiene lazos con los Estados Unidos más allá de su esposa y su hija”, que “alquila su residencia ubicada en el distrito norte de California” y que apenas “tiene algunas fuentes de ingreso con base en trabajos que no están ligados a la bahía de San Francisco”.

Alejandro Toledo

Luego, LaPunzina aludió a la situación financiera del ex presidente. “El señor Toledo tiene acceso a cantidades presumiblemente importantes de dinero, como está detallado en el pedido de extradición [enviado por el Perú] y en la información que nosotros manejamos. Además, tenía una cantidad significativa de dinero en su casa cuando fue arrestado”, señaló. Luego agregó que tiene “una historia de excesivos viajes al exterior”.

Alejandro Toledo

Al mencionar que Alejandro Toledo sí tiene —a diferencia de con Estados Unidos— lazos que lo unen al Perú, LaPunzina fue interrumpida por el abogado del expresidente Joseph Russoniello. “Bueno, los lazos con el Perú no son realmente un problema, porque no nos preocupa que se escape al Perú”, dijo este entre risas.

“¡Correcto! —replicó LaPunzina—, pero esos lazos podrían facilitarle un viaje a otros países que no tengan tratados de extradición con el Perú, como Israel, en el que tiene contactos. Su esposa es ciudadana israelí”, respondió la fiscal.

Minutos después, el juez Hixson intervino para mencionar, por primera vez, uno de sus principales argumentos de cara a mantener detenido a Toledo. “Entiendo que se ha consignado en un reporte previo [a la audiencia] que cuando el FBI inspeccionó su residencia, ¿encontró US$40.000 en efectivo guardados en una maleta?”, preguntó.

A ello, el abogado Russoniello replicó que podía llamar a una testigo —en referencia a — que declarase que el dinero era suyo, y que era guardado en casa para poder costear sus gastos diarios. Ello debido a que todas las propiedades del matrimonio habían sido embargadas por el gobierno peruano. “Hasta su pensión [como ex presidente] ha sido embargada”, añadió.

Finalmente, cuando LaPunzina argumentó que tenía información sobre que el matrimonio todavía poseía una casa en el Perú, cuyo valor ascendía a alrededor de US$1 millón, Russoniello replicó que “hay un fiscal peruano en la corte [en referencia a Rafael Vela], póngalo bajo juramento y sabremos”.

Durante la audiencia, los argumentos de Russoniello giraron en torno a los años que Alejandro Toledo ha pasado en Estados Unidos. “El mismo tiempo, durante su vida adulta, que el que ha pasado en el Perú”, afirmó. Pero también, el abogado hizo alusión al crecimiento económico del país durante el mandato del ex presidente y a una supuesta persecución debido a su origen indígena.

“La economía peruana mejoró significativamente en el 2005, con un aumento del PBI de 5,6%, y en en el 2006, con uno de 8% [...] Hay que pensar en lo que, como una persona de origen indígena, en un país como el Perú, que fue gobernado por un régimen autoritario, en este caso por [Alberto] Fujimori, [Toledo] tuvo que soportar en términos de amenazas a él y a su familia. Por cómo se mantuvo firme pese a las amenazas, obtenemos una muestra de por qué no es solo una persona, sino una persona extraordinaria”, declaró el abogado.

Pese a sus esfuerzos, el juez Hixson terminó la audiencia ordenando que Alejandro Toledo quedara detenido sin posibilidad de pagar una fianza. Sus argumentos finales fueron dos. El primero, que “si el procesado escapara, se trataría de un fracaso diplomático significativo para los Estados Unidos en cumplir sus obligaciones con el Perú bajo el tratado [de extradición que ambos países han suscrito]”.

Finalmente, remarcó que la otra razón para ordenar la detención es que “el señor Toledo tiene riesgo de fuga. Cuando el FBI registró su casa, luego de ser arrestado, encontró US$40.000 en efectivo en una maleta. Entiendo el argumento de que este dinero era de su esposa y estaba destinado a gastos diarios. Sin embargo, sí significa que [Toledo] era móvil y que podría haber tomado esa maleta para salir de viaje. Es una persona que ha viajado mucho y tiene muchas conexiones en varios países, por lo que hay un riesgo de fuga”.