La fiscalía ha solicitado que la cúpula de Sendero Luminoso, entre ellos su cabecilla Abimael Guzmán, sea sentenciado a cadena perpetua. (Foto: Archivo El Comercio)
La fiscalía ha solicitado que la cúpula de Sendero Luminoso, entre ellos su cabecilla Abimael Guzmán, sea sentenciado a cadena perpetua. (Foto: Archivo El Comercio)
Mario Mejía Huaraca

La Sala Penal Nacional dictará mañana sentencia contra y la cúpula de , cuya responsabilidad como autores mediatos del atentado de Tarata que costó la vida de 25 personas está, según la fiscal María Carrasco, fehacientemente demostrada. Por eso, ella dice que solicitó que se imponga la cadena perpetua a los doce procesados.

Si bien la magistrada indica tener plena confianza en que el tribunal determinará la responsabilidad de la plana mayor terrorista en los delitos imputados (terrorismo y narcotráfico) por haber pruebas suficientes , también reconoce tener dudas de que llegue a condenar a todos los procesados. Teme que algunos puedan ser absueltos.

Se refiere a los encausados Osmán Morote y Margot Liendo, quienes han señalado que ellos no podían haber participado en el ordenamiento del atentado por encontrarse en ese momento (en 1992) aislados en el penal de Yanamayo. Ambos se encuentran con arresto domiciliario y podrían salir en libertad pues sus condenas anteriores ya se cumplieron.

La fiscal teme que también podría ser absuelta Elizabeth Cárdenas, quien en su alegato final ha manifestado que estuvo muy poco tiempo en el Comité Central de Sendero Luminoso y que cuando se produjo el atentado ya no formaba parte de la cúpula. Ella cumplió su condena hace varios años y se encuentra en este proceso con comparecencia restringida.

"Esta situación nos preocupa mucho, pues Morote y Liendo podrían salir en libertad. Si son absueltos, nosotros interpondremos un recurso de nulidad", manifestó la fiscal a El Comercio.

Carrasco arguye que Morote y Liendo formaban parte del Comité Central de Sendero Luminoso y nunca renunciaron a él, por lo tanto son responsables de todo lo que decidía esa cúpula criminal. Además, dice que está probado que muchos senderistas tenían comunicación con su organización pese a estar presos.

En cuanto a la autoría mediata del atentado que se le atribuye a los miembros del Comité Central, la defensa ha señalado que nunca se ordenó ese atentado y que fue un hecho fortuito y un error de un comité zonal.

La fiscal Carrasco rechaza este argumento. 

"Los abogados han dicho que no existe un documento en que se ordene poner un coche bomba en la calle Tarata. Es cierto, no hay un documento por cada atentado, pero estos se hacían porque había un lineamiento general del Comité Central que ordenó sabotajes con coches bombas. Además, Abimael Guzmán estaba al tanto de todo lo que pasaba en Lima y nadie podía actuar por su cuenta", explicó.

La fiscal también desvirtuó el argumento de los senderistas de que no se les podía imputar el delito de tráfico ilícito de drogas. 

Carrasco sostiene que hay documentos encontrados en la vivienda donde se ocultaba Abimael Guzmán, en los que se señalan reuniones de mandos senderistas con jefes de firmas de narcotraficantes de la zona del Huallaga y los precios que se cobraba a los narcos por los vuelos de avionetas con drogas y por la protección que se les daba.

"Está comprobado que el mayor aporte económico al partido provenía de la zona del Huallaga y que se autorizó el cobro de cupos a los narcotraficantes para que operaran en esa región", manifestó la fiscal.

La magistrada también se quejó de la actitud obstruccionista y saboteadora que los procesados y sus abogados mostraron a lo largo del proceso. "Se oponían a todo. Interpusieron un montón de excepciones, nulidades, tachas. No dejaban preguntar y tampoco quisieron hablar. Incluso no quisieron hacer uso de sus alegatos finales, pues buscan anular el proceso", aseveró. 

La sentencia de este juicio que se inició el 14 de febrero del 2017 se efectuará este martes a las 9 a.m. en la sala de audiencias de la Base Naval del Callao. Son doce los procesados, pero solo estarán presentes once, pues Moisés Límaco Huayascachi, quien estaba con comparecencia restringida viajó en junio a Francia y no regresó.