La cúpula de Sendero Luminoso tiene pendientes otros dos juicios

La sentencia por el Caso Tarata fue dictada el pasado martes, pero ello no significa el fin de los procesos judiciales contra el cabecilla terrorista Abimael Guzmán y la cúpula de Sendero Luminoso.

Ellos tienen que afrontar otros dos juicios orales, cuyas fechas de inicio están por determinarse.

Uno de ellos es el proceso por la matanza de 117 campesinos en la localidad ayacuchana de Soras, ocurrida en 1984. La acusación fiscal se hizo en marzo de este año. Aún está por fijarse el comienzo del juicio.

El otro caso es el denominado Perseo, en el que se acusa al Movadef –brazo legal del grupo terrorista– de ser parte de Sendero Luminoso y de haber recibido dinero del narcotráfico para financiar sus actividades. Este proceso se encuentra en la fase de control de la acusación fiscal.

En cuanto al primer caso, el titular de la Segunda Fiscalía Superior Penal Nacional, Daniel Jara, formalizó su acusación contra seis miembros de la cúpula senderista, entre ellos Abimael Guzmán, como autores mediatos de la matanza que se ordenó en represalia contra los habitantes de Soras por haberlos enfrentado.

El prófugo terrorista Víctor Quispe Palomino, quien actualmente sigue operando en valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem), ejecutó la orden al mando de unos 40 subversivos armados con machetes, cuchillos y armas de fuego. 

Aún no se ha fijado la fecha para el inicio del juicio oral, debido a que la acusación fiscal fue devuelta por el Poder Judicial en junio pasado para que se subsanen algunos puntos.

Fuentes del Ministerio Público indicaron a El Comercio que la acusación con las precisiones hechas se entregará en un mes. Recién entonces se podrá pasar a la etapa de juicio.

En cuanto a Perseo, el pasado 21 de agosto se realizó la primera audiencia de control de acusación. Por este caso están procesados 42 miembros del Movadef y de Sendero Luminoso, incluidos Abimael Guzmán, Elena Yparraguirre y Osmán Morote entre otros. 

El colegiado viene evaluando el dictamen acusatorio a fin de decidir si devuelve el mismo a la fiscalía para corregir las observaciones planteadas por la defensa legal de los acusados o si finalmente dispone el inicio del juicio oral.

Este caso se remonta al 2014, cuando la policía llevó a cabo la operación Perseo, en la que detuvo a 28 integrantes de la organización que el 2011 buscó convertirse en partido político.