Velásquez Quesquén aseguró que el pedido del Gobierno “está fuera de foco”. (Foto: Archivo El Comercio)
Velásquez Quesquén aseguró que el pedido del Gobierno “está fuera de foco”. (Foto: Archivo El Comercio)
Redacción EC

El congresista aprista afirmó que el Parlamento debe permitir que el jefe del Gabinete Ministerial, Fernando Zavala, presente y exponga su pedido de cuestión de confianza ante el pleno. Sin embargo, dijo que el Legislativo no está obligado a pronunciarse sobre ese pedido de manera inmediata.

Velásquez Quesquén señaló que el debate de la cuestión de confianza, con la que el Gobierno intenta impedir la censura a la ministra de Educación, Marilú Martens, puede durar hasta cuatro sesiones.

“El Parlamento tiene que darle curso, recibir al primer ministro y que exponga sus razones, por qué plantea una cuestión de confianza, se escucha y se debate […] El debate puede durar cuatro semanas”, manifestó en declaraciones a Radio Programas.

El parlamentario aprista, además, calificó como “pecha agónica” la cuestión de confianza planteada por Zavala e indicó que el primer ministro lo hizo “para que se le extienda una alfombra dorada para que él se vaya”. “No ha encontrado mejor pretexto para salir de la PCM [Presidencia del Consejo de Ministros] que plantear una cuestión de confianza”, añadió.

El ex jefe del Gabinete Ministerial señaló que el proceso de censura en contra de Martens debe continuar, porque, desde su punto de vista, es paralelo a la solicitud hecha por Zavala.

Velásquez Quesquén aseguró que el pedido del Gobierno “está fuera de foco”.

Anoche, por medio de su cuenta de Twitter, Fernando Zavala solicitó acudir este jueves al Congreso de la República para sustentar la cuestión de confianza que hoy presentó, luego que un sector de la oposición planteara censurar a la ministra de Educación, Marilú Martens.

El primer ministro aseguró que la cuestión será sustentada como manda la Constitución, y explicó que el Poder Ejecutivo tuvo que recurrir a este mecanismo constitucional porque una política de Estado, como la educativa, está en riesgo.

“El Perú no debe esperar. Pedimos respetuosamente ser atendidos mañana mismo (…). El bienestar de los niños no se negocia”, sostuvo.