El ex presidente Alberto Fujimori había recibido un indulto humanitario pero la gracia fue revocada en octubre del 2018. (Foto: GEC)
El ex presidente Alberto Fujimori había recibido un indulto humanitario pero la gracia fue revocada en octubre del 2018. (Foto: GEC)
Mario Mejía Huaraca

El último 23 de enero, ante el inminente traslado del ex mandatario de la clínica Centenario al penal de Barbadillo, la Secretaría General Nacional de se pronunció a través de un comunicado contra la anulación del indulto ordenada por el juez supremo Hugo Núñez el pasado 3 de octubre.

"Rechazamos y lamentamos la decisión judicial que deja sin efecto el indulto legítimamente otorgado al ex mandatario", reza el comunicado. Sin embargo la posición del partido naranja no siempre ha sido la misma frente a esa atribución presidencial que fue otorgada el 24 de diciembre del 2017 por el entonces mandatario Pedro Pablo Kuczysnki.

Justamente, hace poco más de un año, el 4 de enero del 2018, Fuerza Popular sostuvo, a través de otro comunicado, que se acordó saludar la libertad de Alberto Fujimori "a pesar de discrepar con la forma en que se logró".

Como se recuerda, el ex gobernante Kuczynski otorgó el indulto dos días después de haber sido salvado de la vacancia en el Congreso gracias a los votos de un grupo de legisladores disidentes de la bancada naranja, liderados por Kenji Fujimori.

El día de la votación del pedido de vacancia, Héctor Becerril (Fuerza Popular) dijo que el propio Alberto Fujimori había llamado a diez congresistas de la bancada "para que voten a favor de la corrupción a cambio de su indulto. (...) "Lo han negociado por el indulto”, aseguró.​

Luis Galarreta señaló ese día, por su parte, que se debería preguntar a cada uno de los que votaron en contra de la vacancia, "porque sería lamentable que hayan negociado el indulto por la vacancia".

Sin embargo, después de otorgado el beneficio, Becerril expresó que el indulto "nos llena de fe, alegría y optimismo" y que ojalá sirva para cerrar heridas y llegar al Bicentenario "como un país sin odios y sin rencores".

No obstante, Fuerza Popular, liderado por la ex candidata presidencial Keiko Fujimori, insistió en que Kuczynski se salvó de ser vacado gracias a que habría ofrecido dádivas a legisladores de esa bancada y la promesa de otorgar el indulto. Tras la difusión de audios y videos, el ex mandatario se vio obligado a renunciar y Kenji Fujimori fue suspendido luego de un proceso que impulsó su ex bancada.

No obstante esos antecedentes, cuando el juez Hugo Núñez emitió su resolución anulando el indulto humanitario, Keiko Fujimori rechazó la decisión judicial argumentando que detrás de esta estaban sus "enemigos políticos". 

Ella fue respaldada por los miembros de la bancada de su partido, quienes aparecieron ante cámaras con carteles donde se podía leer "no más rencores" y "basta de odios". Ya no volvieron a hablar sobre las sospechas que tenían acerca de cómo se dio el indulto. Y ahora, más bien, manifiestan que el indulto fue legítimamente otorgado.

Cabe anotar, además, que durante la campaña electoral del 2016 Keiko Fujimori dio a entender que no indultaría a su padre si llegaba a la presidencia. "La decisión de la libertad de mi padre se va a ver a través de la vía legal y constitucional", declaró a la prensa.

Más adelante, en mayo del 2017, Fuerza Popular archivó en la Comisión de Justicia una iniciativa sobre arresto domiciliario impulsada por Roberto Vieira que buscaba beneficiar a Alberto Fujimori.

En esa oportunidad, el legislador no agrupado cuestionó a Fuerza Popular por "haberle dado la espalda" al ex presidente condenado a 25 años de prisión y le increpó a su hija Keiko que "primero está el corazón que el cálculo político".