El exfiscal Avelino Guillén juró este miércoles como ministro del Interior en la gestión del presidente Pedro Castillo, y será el tercer funcionario que se hará cargo de dicha cartera, en los primeros cien días de gobierno.
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Guillén asumirá funciones tras la renuncia de Luis Barranzuela, después de los cuestionamientos a su permanencia en el Gabinete Ministerial por haber realizado una reunión en su casa en plena pandemia.
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“Bienvenido, apreciado Avelino Guillén. Tu conocimiento, experiencia y trayectoria nos permitirán seguir luchando contra la delincuencia y, además, estaremos más cerca de cumplir los anhelos profundos de nuestro pueblo”, escribió el presidente Castillo en su cuenta de Twitter.
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Consultados por este Diario, los exministros del Interior Rubén Vargas y Carlos Basombrío destacaron la designación de Avelino Guillén y coincidieron en que dos deben ser las prioridades de su gestión: la intervención de las Fuerzas Armadas en apoyo a la Policía y la lucha contra las drogas.
Para Rubén Vargas, Guillén cuenta con un “pergamino profesional intachable”, especialmente en cargos de responsabilidad en el Ministerio Público, tras señalar que es una persona idónea para el cargo de ministro del Interior.
Apuntó que hay temas importantes en agenda y tendrá tomar decisión sobre ellos.
“En el tema de la lucha contra las drogas, tiene que recomponerse los mensajes del sector respecto a la postura que había señalado su antecesor, de oponerse a la erradicación, tiene que ser zanjado rápido y de manera clara, la lucha contra las drogas tiene que ser una prioridad”, dijo.
Vargas añadió que el segundo gran tema es “ordenar y redefinir esta decisión que tomó su antecesor de manera equivocada” sobre la inclusión de los militares en la lucha contra la inseguridad ciudadana.
“Esa resolución suprema con el que autoriza la intervención de las Fuerzas Armadas tiene que ser derogada o replanteada no en los términos que se ha señalado, la policía tiene que ser reivindicada”, declaró.
En tanto, Carlos Basombrío consideró que es necesario escuchar al ministro Guillén pronunciarse sobre estos dos temas. “Queremos saber cuáles van a ser sus decisiones, son las dos prioridades en el sentido de aceptar o tomar distancia de las políticas de su antecesor”, dijo.
Tras destacar su perfil profesional, Basombrío indicó que durante el debate electoral, Guillén enfatizó en la importancia de implementar políticas de prevención contra la inseguridad ciudadana, pero estas propuestas serían contradictorias a lo dispuesto por el gobierno días atrás para incluir a las Fuerzas Armadas.
“Prevenir es una tarea de largo plazo, pero eso entra en contradicción con la política del gobierno, establecida con la resolución suprema de hace unos días, de militarizar la seguridad ciudadana , son políticas contradictorias, tenemos una situación esquizofrénica, exactamente en el sentido opuesto que indicaría del nombramiento de Avelino Guillén”, afirmó.
Basombrío también manifestó que el ministró deberá decidir sobre lo que ocurrirá con la erradicación de cultivos de coca.
“Tiene un enorme desafío frente a la decisión de reempadronar a los cocaleros que producen para el narcotráfico, los que producen, ¿él va a continuar con esa decisión de reempadronar a los cocaleros y suspender la erradicación? la erradicación depende del Ministerio del Interior”, agregó.
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