Jorge Ramírez
Jorge Ramírez
Rodrigo Cruz

El procurador ad hoc del Caso Lava Jato, Jorge Ramírez, concluyó el fin de semana pasado una tarea que lo tenía ocupado desde hace más de un año: fijar el monto de la reparación civil que la constructora brasileña Odebrecht deberá pagar al Estado por los daños que ocasionó con los pagos de sobornos a políticos y funcionarios. En esta entrevista, cuenta detalles de cómo se llegó a fijar el monto.

— En enero de este año usted anunció que la reparación civil que Odebrecht debía pagar era de S/1.400 millones. ¿Por qué ahora es de S/610 millones?
Hay que diferenciar lo que pasaba en el 2017. Si bien es cierto que esa cifra se anunció en enero, el cálculo se realizó en el 2017. Y se hizo en función al Código Civil. Pero la situación cambió en el 2018.

— ¿Qué cambió?
Por ejemplo, en marzo se promulgó la Ley 30737 y posteriormente su reglamento, que estableció fórmulas para medir una reparación civil. Estas se basan en criterios como las utilidades estimadas de la empresa, el porcentaje de la participación de la empresa en proyectos y la capacidad de pago.

— Es decir, si no se hubiera aprobado esa ley, ¿seguiríamos con el monto inicial?
No. No es correcto. Porque en el 2017 se calculó el monto sobre más proyectos. La cifra del 2018 se ha realizado solo con base en cuatro obras: [Vía de] Evitamiento-Cusco, Costa Verde-Callao, metro de Lima-línea 1 y la Interoceánica tramo 2 y tramo 3.

— ¿Por qué solo cuatro proyectos formaron parte del acuerdo con Odebrecht?
Porque se trata, como tú lo has dicho, de un acuerdo. Este acuerdo se ha realizado en el marco de la colaboración eficaz de la empresa. Además, es la misma empresa la que voluntariamente ha reconocido que pagó sobornos en estos cuatro proyectos.

— ¿Pero con el tiempo se podrán aumentar las obras para que estas se acumulen a la reparación civil?
Sí se podrá si se descubriera que han sobornado en otros proyectos y se cobrará, como corresponde, una reparación civil. Sin embargo, no se debe de perder de vista que, a nivel continental, en los países donde Odebrecht ha reconocido que pagó sobornos, las autoridades llegaron a acuerdos tomando en consideración el doble del soborno que reconocieron.

— Recuerdo el caso de República Dominicana, donde Odebrecht va a pagar una reparación civil de US$184 millones cuando reconocieron que pagaron US$92 millones en sobornos.
En el Perú, los sobornos reconocidos por la empresa por estos cuatro proyectos suman cerca de US$32 millones. Esto equivale, si se pone en relación a los S/610 millones, más de cinco veces el soborno reconocido. Por eso considero que la cifra fijada es equilibrada.

— ¿Por qué equilibrada?
Porque el daño que hasta el momento Odebrecht ha generado, calculado por la contraloría, supera los S/1.500 millones. Odebrecht prácticamente va a pagar la mitad de este monto y, además, está colaborando con las investigaciones. La pretensión de la procuraduría es que el saldo restante debe ser cobrado a las empresas que están involucradas de manera directa en estos hechos.

— Es decir, ¿a los consorciados de Odebrecht?
No solamente a ellos, sino también a las empresas que han incurrido en estos hechos. También a las personas naturales, como funcionarios y empresarios. En este momento, tenemos S/200 millones embargados en el Caso Lava Jato, que son personas naturales, entre funcionarios, de medianos y altos cargos, y empresarios.

— ¿Cómo fue la negociación con la empresa?
Muy difícil. En diciembre del año pasado, ellos querían ofrecer el doble del soborno que reconocían haber pagado. Eso era aproximadamente S/180 millones. Y ahora, interpretando ellos el reglamento de la Ley 30737, querían pagar S/297 millones. Nosotros nos opusimos.

— ¿Cómo hicieron para que la empresa retrocediera en su pretensión inicial?
Porque no íbamos a firmar el acuerdo, y si no lo firmábamos, no iba a tener el peso suficiente para ser aprobado. La empresa, entonces, evaluó esta situación.

— ¿Cómo se va pagar esta reparación civil?
En principio, este dinero será pagado en un período de 15 años, pero hemos fijado algo que ningún país de la región ha hecho hasta la fecha: un fideicomiso de garantía. Este establece que, durante los primeros cinco años de vigencia del fideicomiso, le vamos a retener el 5% de todos los pagos que entidades del Estado o empresas privadas realicen a favor de la constructora Norberto Odebrecht. Y a partir del séptimo año, se le va a retener el 7%. Ese dinero irá al fideicomiso.

— ¿Dónde se va a depositar ese dinero?
Seguramente la cuenta se abrirá en el Banco de la Nación, pero será administrado creo por Cofide o por el mismo banco. Este fideicomiso también será alimentado con el 50% de los dividendos recibidos de las sociedades concesionarias en el Perú por la constructora Norberto Odebrecht y alimentado por el 25% de las retenciones del precio de venta de bienes y derechos de la constructora Norberto Odebrecht, cuyo precio de venta sea superior a los US$3 millones.

— Congresistas de oposición han dicho que el monto de la reparación civil fijado es ínfimo.
Yo respeto las opiniones de los parlamentarios. Lo que puedo decir respecto a la cifra es que es un monto equilibrado, ya que se está pagando la mitad del daño calculado hasta este momento por la contraloría. Creo que es un monto equilibrado en cuanto a estos cuatro proyectos. Además, están los S/65 millones que la empresa también debe pagar como reparación civil por la carretera Chacas (Caso ‘La Centralita’). Si sumamos todo, la cifra es de un poco más de US$ 200 millones.

— ¿Recibió algún tipo de presión del Ejecutivo o de otro sector para hacer el cálculo de la reparación?
No, para nada. Lo que puedo dejar constancia es que ningún ministro de Justicia ha interferido en mi gestión. Todo ha sido en el marco de la Ley 30737 y su reglamento.