ONPE cuestionó financiamiento de campaña de Humala en el 2011
ONPE cuestionó financiamiento de campaña de Humala en el 2011

Las confesiones de Jorge Barata, ex representante de Odebrecht en el Perú, relacionadas al aporte de US$3 millones que habría realizado la empresa para la campaña presidencial de , vuelven a poner los focos sobre el financiamiento de Gana Perú en el 2011. Más aun con la por presunto lavado de activos de ese partido.

Según la información revelada en exclusiva por la Unidad de Investigación de El Comercio, personalmente a Nadine Heredia. Un monto que no ha sido declarado oficialmente por Gana Perú, en la campaña presidencial que encabezó el ex presidente Ollanta Humala.

Sin embargo, esa no esa no sería la única irregularidad identificada en el financiamiento de la campaña de Humala. Un informe emitido en abril del 2012 por la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) ya daba cuenta de aportantes fantasma y gastos no declarados por parte de Gana Perú.

Yo no fui
El reporte de la gerencia de supervisión de fondos partidarios señala que ONPE intentó corroborar el aporte de 135 personas por poco más de S/9 millones. Quince de ellas negaron el aporte declarado por el partido —que ascendía a S/1.6 millones—, mientras que once afirmaron haber aportado cantidades menores a las declaradas por Gana Perú —por un total de S/1.1 millones—.

Al respecto, el partido de Ollanta Humala y Nadine Heredia argumentó que se había incluido por error a acompañantes o emisarios de verdaderos aportantes. En los casos de aportes menores a los declarados, Gana Perú señaló que se incurrió en un "error en la migración de datos", según el documento de la ONPE.

La ONPE aceptó los descargos, pero enfatizó que estos mostraban la carencia de "un sistema confiable de recaudación" de los aportes. Según el tesorero del partido, los aportes eran recibidos en efectivo, en sobres cerrados y no se contaba el dinero recibido.

Gastos no declarados
El organismo electoral también cuestionó una serie de gastos realizados por el partido de Nadine Heredia y Ollanta Humala que no estuvieron debidamente sustentados. Así, el informe de la ONPE señaló que el Partido Nacionalista no declaró ni sustentó los gastos relacionados a cenas, almuerzos o cocteles utilizados para recaudar fondos.

Si bien el monto no declarado que halló la ONPE superaba los S/500,000, Gana Perú reconoció que dejó de consignar ingresos por S/1.3 millones. Dicha situación fue atribuida al "desorden típico de una campaña electoral" y, nuevamente, "a un error en la migración de data". Además, el tesorero del partido reconoció que en muchos casos no se le exigió documentación a los responsables de realizar determinados pagos.

Dichos argumentos fueron aceptados por la ONPE, tras comprobar que "no había cómo obtener la información" relacionada a esos gastos. A pesar de esto último, las observaciones se consideraron subsanadas y sólo se le exigió a Gana Perú "adoptar de inmediato las medidas correctivas necesarias para fortalecer mecanismos de control interno".

Financiamiento de viajes
Por otro lado, la ONPE también realizó observaciones a los gastos relacionados a viajes de Ollanta Humala y su comitiva durante la campaña electoral. El ente electoral solicitó que, en casos estos hayan sido financiados por terceros, se identifique a esas personas naturales o jurídicas.

El partido de Nadine Heredia y Ollanta Humala no lo hizo. Ello porque "dichos gastos estuvieron a cargo de afiliados y simpatizantes que no pudieron ser identificados por las personas encargadas de realizar dichas actividades", debido a un sistema de control ineficiente.

En respuesta, la ONPE dio por válido el argumento. El organismo señaló que era "evidente que la falta de organización y control reconocida por el partido ha limitado la información disponible en la rendición de cuentas y verificación de las finanzas partidarias".

Según el informe, en total la campaña presidencial de Ollanta Humala habría recibido ingresos por alrededor de S/22.2 millones, mientras que sus gastos habrían ascendido a S/25.5 millones. Es decir, la gerencia de supervisión de fondos partidarios del organismo electoral encontró en ese entonces un desbalance de casi S/3 millones, que hoy cobra especial relevancia.

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