Hacienda MonteRico, el refugio campestre que puedes disfrutar sin salir de Lima

Originalmente, Hacienda Monterrico fue una hacienda azucarera y algodonera fundada en 1906. A lo largo del tiempo, se convirtió en un referente de eventos en la ciudad.

Un espacio con historia

Tras la pandemia, con una renovación en su gestión y modernización de sus instalaciones, el lugar experimentó un rebranding significativo, en el que empezarían a entrar en el mundo gastronómico como restaurante. “Queríamos mantener la esencia de la hacienda, pero darle un giro más gastronómico y contemporáneo”, señala Ugo Valle, gerente del espacio.

Hoy en día, con casi 70% de áreas verdes, ofrece una experiencia distinta dentro de Lima, evocando la sensación de estar en el campo sin alejarse de la ciudad pero también manteniendo gran expectativa en lo culinario.

Propuesta gastronómica con identidad

La carta de Hacienda MonteRico mantiene la esencia de su historia con su icónico pollo a la leña, pero con un toque diferenciador al utilizar pollos bebé para una propuesta más exclusiva y distinta a la convencional. “Nos diferenciamos por la textura y el sabor. Usamos pollos de menor tamaño, lo que permite una carne más jugosa y con mejor absorción de los aromas de la leña”, explica Valle.

Además, cuentan con una variada selección de carnes de calidad, aprovechando su infraestructura de parrillas y hornos.

En su oferta también destaca su línea de “bandejeables”, que permiten a los comensales realizar un recorrido por las tres regiones del Perú con opciones criollas, andinas y amazónicas. “Queremos que la gente pruebe un pedazo de cada región sin moverse de la mesa”, agrega Ugo.

En cada opción encuentras platos icónicos de cada región, pero todas se acompañan con pollo bebé a la leña. En la criolla encuentras anticuchos de corazón de res, papa dorada, arroz, choclo y frejoles. El bandejeable de los andes presenta humita dulce, chaufa de quinua y choclo con queso. Por último, pero no menos importante, en el amazónico comparten patacones dulces, chorizo selvático, chaufa con cecina y ensalada de palmitas, por supuesto, acompañado con una sarsa amazónica con cocona.

Recientemente, Hacienda MonteRico ha lanzado una alianza con Segundo Muelle para incluir opciones de comida marina en su carta, como ceviche y arroz con mariscos. “Nuestros clientes pedían opciones de pescados y mariscos, así que decidimos aliarnos con los mejores en el rubro”, explica el gerente.

El bar del restaurante está a cargo de Johan Salas, un barman con experiencia en la alta coctelería. La carta incluye tragos de autor que rescatan insumos no convencionales, como el tumbo, un fruto amazónico similar a la maracuyá. “Queremos que la coctelería también sea una experiencia sensorial distinta, con ingredientes que no se encuentran en cualquier bar”, comenta Salas.

Eventos exclusivos en un ambiente privilegiado

A pesar de su transformación en restaurante, Hacienda Monterrico sigue siendo un espacio ideal para eventos corporativos y sociales. “Muchas marcas confían en nosotros por la ubicación y la versatilidad del espacio”, indica uno de los gestores del lugar.

Con su propuesta de alta cocina, su entorno privilegiado y su enfoque en la excelente atención, Hacienda MonteRico se consolida como un destino gastronómico único en Lima, ideal para quienes buscan desconectarse de la rutina sin salir de la ciudad.