Repartidor llegó a casa para dejar pedido, pero se distrajo de forma insólita y se volvió viral

Quienes bordean los 30 años han disfrutado de una niñez llena de juegos en las calles, de esperar el momento de salir al parque a pelotear con los amigos o reunirse con los vecinos para hacer volar su imaginación con divertidas propuestas alejadas de la tecnología. Un video grabado por la cámara de seguridad de una casa demuestra que un repartidor no olvida esas anécdotas y al ver una rayuela o mundo dibujado en el piso, no lo pensó dos veces y recordó su infancia. El peculiar instante ya es viral en Facebook.

En las imágenes se ve cómo el protagonista desciende de la camioneta blanca que lo lleva por distintas avenidas de Estados Unidos para cumplir con su trabajo. Portando una pequeña caja en la mano empieza a caminar hacia la puerta de la vivienda; sin embargo, algo lo hace detenerse.

En esa casa los niños sí que se divierten con un tradicional juego y que ahora es poco común verlo dibujado en las pistas o veredas. Se trata de la rayuela o conocido como avión, mundo, truque, cuadrado, chilena o volantín, entre otros nombres. Para este solo se necesita una superficie lisa y una tiza para poder jugar. Se dibujan cajas con números del 1 al 10 y hay que recorrer el circuito saltando en un pie luego de tirar una piedra.

Demostrando su equilibrio y coordinación, el repartidor se anima a revivir esos años en los que jugaba con sus amigos en la calle y se pone a saltar. En el video de Facebook se le ve muy feliz y hasta celebra con los brazos en alto al terminarlo.

Si el joven ya se había sorprendido al ver tan nostálgico juego en el piso, quedó más impresionado al llegar a la puerta de la casa y darse cuenta que la mujer que recibiría el paquete había visto toda la escena.

Lejos de avergonzarse o preocuparse por estar en horario de trabajo, en el video de Facebook se le ve sonreír aún más y 'felicitarla' por tener ese dibujo en la entrada de su hogar. El repartidor se despide amablemente y se retira con la satisfacción de no haber dejado de saltar en un pie