Rápido y ecológico. El Hound Bus es una veloz realidad que rompió el récord de velocidad para un vehículo de transporte masivo al superar los 120 kilómetros por hora (unas 76 millas por hora), como quedó registrado en YouTube.
El hecho no pasaría de lo anecdótico si no fuera que estos buses, que circulan por las calles de Inglaterra, utilizan como combustible excrementos de vaca y su capacidad quedó demostrada, como se ve en YouTube, en las pruebas realizadas sobre la pista de carreras del Millbrook Circuit, en Bedford.
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Aunque no pudo establecer su marca como un récord mundial Guinness -necesitaba superar las 150 millas por hora- el Hound Bus demostró en YouTube el gran futuro que tiene el biometano -producido por la digestión anaeróbica de excremento de la vaca en un bioreactor- como combustible.
El ingeniero jefe de la empresa, John Bickerton, dijo a BBC que “hemos establecido un reto para otros operadores de autobuses para mejorar nuestro registro y tuvimos que hacer que sea un poco difícil para ellos”.
El propósito de las pruebas compartidas en YouTube, según Bickerton, fue cambiar la imagen de un transporte sucio, lento y maloliente por el verdadero: moderno, rápido y en la vanguardia de la innovación.
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Por su parte, el director general de la operadora Reading Buses, Martijn Gilbert, dijo: “Esto es fantástico. ¡Qué gran anuncio para el biometano que está creciendo en popularidad cada día”, según recogió el portal británico Metro.
El Hound Bus debe su nombre al auto supersónico británico Bloodhound, que intentará batir el récord de velocidad sobre tierra. Su decoración se a la piel de la vaca, en “honor” a la procedencia de su “gasolina”.
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#GoogleMaps da resultado insólito sobre Belaunde Lossio ► http://t.co/K8g6IeeAUb pic.twitter.com/CklGWJfMgc— El Comercio (@elcomercio) Mayo 27, 2015
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