Mujer surfista lucha contra los estereotipos dominando las olas más bravas del mundo [VIDEO]

Bianca Valenti es una gran surfista que domina las difíciles olas de Mavericks (San Francisco, California). Como crítica de los estereotipos sexuales contra la mujer surfista, ella nada con un traje de neopreno, capucha y equipo de protección dejando de lado los bikinis y las tangas acostumbradas en esta industria, cuenta la serie de YouTube "Great Big Story".

"Las mujeres surfistas se han comercializado de forma muy sexual. Ves a una chica en un bikini o un tanga de pie en una playa, pero cuando vas por ahí es totalmente diferente. Estamos usando trajes y capuchas completos y botines y nosotros no estamos tratando de ser sexy. Vamos por ahí a ser más fuertes, mejores seres humanos, más impresionantes", dice Valenti. "Surfear olas grades es muy feroz. La gente ha dicho que las mujeres ni pueden navegar por ella, pero yo sí".

Valenti es una profesional del Big Wave Surfer con sede en San Francisco. Navega sobre las olas californianas desde hace 11 años. La primera vez que lo hizo casi se ahogó, y fue desde aquella experiencia que decidió que entrenar y formarse para montar grandes olas. Y decidió hacerlo en Mavericks, una de las mecas de las olas grandes del surf.

"El agua en San Francisco es muy, muy fría. A veces incluso hay hielo en la arena por las mañana y cuando está muy frío sientes hormigueos en las manos. Tienes que tener una piel muy gruesa y estar muy decidido, resuelto y motivado porque esto no es Hawái", dice. "Mavericks es un lugar de surf con olas gigantescas que se rompen. Se le ha llamado el Monte Everest del surf y se encuentra a 20 minutos al surf de San Francisco".

Una ola promedio tiene de 0,9 a 1,2 metros de altura. En Mavericks empiezan a romper con un tamaño de 4,5 metros y han habido personas que han montado sobre olas de 30 metros, cifra que explica fácilmente las muertes de algunos surfistas en sus aguas. "Es solo para expertos", enfatiza Valenti.

"Cuando escucho a alguien decir que las mujeres no son lo suficientemente fuertes o buenas para navegar por grandes olas, empiezo a reír porque me hace sentir viva y me encanta. Se trata de un reto a ti mismo. Se trata de perseverar y superar los obstáculos y por lo que es una experiencia mucho más profunda para mí personalmente y por eso me abrazó el surf en San Francisco", considera.

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