Redacción EC

Dentro del contexto de la , el Domingo de Resurrección representa la celebración cumbre de la fe cristiana. Sin embargo, su significado se profundiza al comprender la importancia del , el día que lo precede. A continuación, te contamos todos los detalles del Sábado Santo.

¿QUÉ OCURRIÓ EL SÁBADO DE GLORIA, SEGÚN LA IGLESIA?

El Sábado Santo, tercer día del Triduo Pascual, marca para la Iglesia un período de profunda reflexión y silencio. Durante esta jornada, los fieles rememoran el tiempo en que Jesucristo permaneció en el sepulcro tras su crucifixión. Este día se centra en la meditación sobre el sacrificio de Cristo y su descenso al abismo, un acto de liberación de las almas justas según la tradición.

En este día de recogimiento, la Iglesia Católica se abstiene de celebrar la Eucaristía y la mayoría de los sacramentos, permitiéndose únicamente la penitencia y la unción de los enfermos. En su lugar, se fomenta la realización de retiros espirituales, la oración y la contemplación, preparando así a los creyentes para la trascendental celebración de la Resurrección en la Vigilia Pascual.

¿POR QUÉ SE LE CONOCE AL SÁBADO SANTO COMO SÁBADO DE GLORIA?

Históricamente, el Sábado Santo era conocido como “Sábado de Gloria” debido a la antigua práctica de celebrar la Vigilia Pascual, la liturgia que conmemora la resurrección de Jesucristo, en la mañana de este día. Esta costumbre respondía a las estrictas normas de ayuno que exigían a los fieles abstenerse de alimentos desde la medianoche hasta recibir la comunión. Para evitar un prolongado periodo de ayuno, la Iglesia optaba por adelantar la celebración de la Vigilia al sábado por la mañana, según información del portal DesdeLaFe.

Sin embargo, importantes reformas litúrgicas impulsadas por el Papa Pío XII en 1955 y posteriormente por el Concilio Vaticano II modificaron esta tradición. Estas reformas permitieron trasladar la celebración de la Vigilia Pascual a la noche del sábado, recuperando así la tradición de esperar la resurrección al amanecer del domingo. A pesar de este cambio en el horario de la celebración, la denominación “Sábado de Gloria” persiste en muchos lugares, recordando la anticipada alegría de la Resurrección que antiguamente se celebraba en este día.

¿POR QUÉ ES IMPORTANTE EL SÁBADO DE GLORIA?

En el desarrollo de la Semana Santa, el Sábado Santo emerge como un día de profunda introspección para la comunidad cristiana. Situado entre el sombrío recuerdo de la crucifixión y la inminente celebración de la Resurrección, este día conmemora el tiempo en que Jesús permaneció en el sepulcro. Este período de silencio y espera no es un vacío, sino un momento crucial para la reflexión sobre el misterio pascual.

Lejos de ser un mero día de transición, el Sábado Santo reviste una gran importancia como jornada de esperanza y preparación para la Vigilia Pascual. Simboliza la espera entre la muerte y la promesa de la vida eterna, ofreciendo a los fieles la oportunidad de meditar sobre el sacrificio de Cristo y prepararse espiritualmente para la alegría de la Pascua. En este día, la fe en la resurrección se mantiene viva en el silencio, anticipando la luz gloriosa del Domingo, según explica la plataforma ADN 40.