

Al volante del nuevo Chery Tiggo 4: ¿cómo es y cuánto rinde con su motor de 1,5 litros ACTECO?
Resumen generado por Inteligencia Artificial
Función solo para suscriptores
Este contenido está disponible solo para suscriptores. Escucha las noticias en audio y mantente informado sin interrupciones.
La historia del Tiggo 4 inicia en 2020 cuando la tendencia hacia la preferencia de los SUV se consolidó a nivel mundial. Hoy, tras cinco años en el mercado, este modelo se actualizó con leves cambios en su diseño y una mejora en su equipamiento. Para conocer mejor esta nueva versión, lo probamos y te contamos nuestra opinión acerca de sus características.
El nuevo Tiggo 4 llega en dos versiones, 1,5 MT Full y 1,5 CVT Full. Nosotros manejamos la versión mecánica que, además, estaba equipada con un sistema GLP.
Lo primero que debes saber es que el Tiggo 4 es un SUV compacto de corte urbano. Mide, 4,32 metros de largo, 1,831 metros de ancho y 1,65 metros de alto. Con estas dimensiones, compite directamente con el Changan CS35 Plus, JAC JS3, Geely Coolray, Kia Seltos, Hyundai Creta, entre otros.

En este segmento de SUV, los modelos tienen el largo de un hatchback promedio, aunque la habitabilidad es más cómoda. En el caso del Chery Tiggo 4, consideramos que existe un equilibrio adecuado para el espacio de piernas y cabezas de los ocupantes delanteros y de la segunda fila. Personas de 1,85 metros podrían ingresar cómodamente.

En el caso del maletero, su capacidad es 340 litros, ampliables a 1.100 cuando abatimos la segunda fila. ¿340 litros es una buena cifra? El promedio en su categoría es 380 litros, por lo que el Tiggo 4 ofrece un espacio ligeramente menor. De igual modo, ingresan dos maletas grandes y un par de mochilas.


Tal como se mencionó antes, la unidad que probamos tenía un sistema GLP y, en este caso, optaron por colocar el tanque en el espacio que hay cuando sale la rueda de repuesto. Esto genera que el espacio real del maletero se sacrifique un poco y, a cambio, se obtenga una mejor eficiencia del combustible.
Por el lado del diseño, el nuevo Tiggo 4 recibió ligeros cambios, la parrilla es más grande, los faros son menos voluminosos y más alargados, mientras que el diseño de las luces neblineras deja esa forma cuadrangular por una tira alargada. En especial, este último diseño le aporta elegancia.

Por el lateral, no hay mayores cambios, mientras que en la zaga el diseño de las luces traseras cambia radicalmente. Tal como se ha visto en el Tiggo 7 y 8, los dos faros están unidos a través de una tira LED, de modo que brinda la percepción de un diseño más unificado. Adicionalmente, a diferencia de la versión pasada, dicha zona trasera se ve más elegante porque luce el lettering de Chery en lugar de su común logo.
En general, el diseño se actualiza y luce más parecido a sus “hermanos” mayores, asimismo el equipamiento mejora bastante, especialmente desde la óptica.
El nuevo Tiggo 4 integra unas luces delanteras LED en sus dos versiones y deja atrás las clásicas luces halógenas (amarillas). Ahora ofrece una mejor visibilidad en la oscuridad y eso se agradece, particularmente cuando se conduce por la carretera.
De igual forma, hay que destacar que ofrece luces LED diurna DRL y el sistema Follow me home, el cual mantiene la luz delantera encendida por unos 30 segundos, incluso después de bloquear las puertas de seguridad. En nuestra experiencia, el sistema fue útil porque cuando llegamos a casa y la luz de la cochera está apagada, entonces tienes un rango de tiempo para prenderla sin golpearnos.
Otros elementos a tomar en cuenta es que tiene neblineros posteriores, útiles en zonas de poca visibilidad, un regulador de altura de los faros y espejos retrovisores ajustables manualmente.
Pasando al habitáculo, encontramos asientos tapizados en eco cuero, los cuales son suaves y acolchados. No hay costuras sueltas y tienen terminaciones precisas. Por su parte, el volante está forrado en cuero y brinda un tacto agradable. Con relación a otros tapizados, la consola ofrece algunos forrados en materiales suaves, mientras que tanto en el tablero como en la consola central hay materiales que simulan madera. Al generar presión sobre estos, todos se sienten firmes, aunque existe una sección por debajo de la pantalla táctil que podría ser más rígida.
Un aspecto muy destacable es la gran cantidad de ítems que tiene como equipamiento interior. Si bien los asientos delanteros son de ajuste manual, tiene un tablero LCD de buena resolución, espejo con retrovisor antireflejo, pantalla multimedia LCD de 10,25″ con Android & Apple Car Play con conexión inalámbrica, entrada USB tipo A y tipo C, bluetooth con radio, así como cuatro parlantes y dos tweeters.




Tiene un equipamiento muy completo de acuerdo a su segmento. Un punto interesante es que la pantalla tiene un interfaz ágil, además que nos agrada la tonalidad de los colores vivos que se proyecta.
Siguiendo la línea del Tiggo 7, presenta una tercera zona táctil para controlar el aire acondicionado, el cual tiene un acceso rápido e intuitivo.
Pasando al ámbito de la motorización y esquema mecánico, se debe acotar que esta versión mantiene el propulsor de 1,5 litros ACTECO de cuatro cilindros con inyección multipunto y doble árbol de levas. Es un bloque de aluminio genera 114 hp a 6.150 rpm y 143 nm a 4.000 rpm. La relación peso-potencia es 11,7 kg/hp, la cual es más que suficiente para mover los 1.343 kg del vehículo. Al menos con la transmisión mecánica de cinco marchas, el carro tiene un desenvolvimiento correcto y se desarrolla muy bien en la ciudad. De hecho, el hábitat natural de este carro es la ciudad: siempre fue un carro urbano.

La primera marca es bastante corta, por lo que algunas veces hay que “sostener” el pie en el embrague para que no se apague el motor. Esta situación nos sorprendió inicialmente en pleno tráfico de Lima, pero al cabo de unas horas el conductor termina adaptándose al Tiggo 4.
Para viajes a la sierra, esta versión nos parece adecuada, ya que la transmisión mecánica permitirá entregar un poco más de potencia cuando se necesite. Lógicamente, habría un sacrificio en la eficiencia de combustible, pero uno podría tener un manejo más controlado a comparación de la versión CVT.
Otros aspectos importantes son su giro del volante suave, sus frenos de disco en las cuatro ruedas que le otorgan una frenada firme y su suspensión cómoda. Pese a que utiliza una barra de torsión (no independiente), no hay un excesivo rebote cuando una de las ruedas cruza un bache.
Respecto al consumo de combustible, utiliza gasolina y GLP para funcionar. Es decir, tiene un sistema híbrido. Utiliza GLP en mayor proporción y la gasolina solo es para para lubricar algunos elementos del motor como, por ejemplo, las válvulas.

Para calcular el consumo de combustible mixto existen algunos métodos, destacándose la relación de 1 a 9, la cual señala que con un litro de GLP se puede recorrer 90% más de lo se podría con gasolina. De igual forma, el otro método de cálculo es agregar 1 litro al gasto de gasolina, pero para este caso tomaremos el primero.
Si bien la explicación puede ser compleja, es necesaria para entender el consumo de un carro dual. Después, tomaremos en cuenta el consumo promedio de gasolina en la ciudad, que en este caso fue 8,4 km/litro. Al aplicar el primer método, se obtiene un consumo mixto de 61 km/galón.
Para entender el beneficio que te brindaría el Tiggo 4 dual frente a uno gasolinero, hay que realizar un contraste entre los precios y el consumo promedio. En este caso, solo lo hemos conducido en el tráfico de Lima.
- Consumo con GLP + gasolina: 61 km/galón (calculado)
- Consumo con gasolina: 40 km/galón (promedio)
- Precio por galón de GLP: S/6.80
- Precio por galón de gasolina premium: S/.15.00
Por último, se recalca que este ahorro aproximado del 50% fue en la ciudad, puesto que en carretera podría ser mayor. Tal como es evidente, la mejora en la eficiencia del consumo de combustible tiene un impacto positivo en la autonomía.