Nora Sugobono

Siempre que voy a un restaurante de , o escribo sobre alguno, me gusta empezar por los detalles: acompañamientos, salsas, vinos, coctelería. No sé si sea una opinión generalizada, o solo una manía personal, pero encuentro que ahí podemos ver diferencias que bien pueden condicionar la visita.

Por supuesto que los cortes (T-bone, tomahawk, asado de tira angus, bife ancho, etc.) son los protagonistas por aquí, pero también lo son la cremosidad y generosidad en purés y pastas; qué tan golosos son los postres; y cuánta variedad hay en las entradas. A mayores posibilidades, más completa resulta la experiencia.

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Hace poco estuve en el nuevo local de La Cuadra de Salvador, con sede en Chacarilla y operativo oficialmente desde este jueves 18 de agosto. Amplio, alto, imponente. Lo primero que recibe al comensal es la barra, comandada por el talentoso Renzo Amaya. Creaciones de autor como un negroni serrano (preparado con el destilado Matacuy) o una Inka Colada (variación de la piña colada, con esencia de choclo) comparten espacio con clásicos de siempre y una cava en definitiva surtida.

En la carta de La Cuadra de Salvador también hay platos con pescados y mariscos. Al frente, una ensalada caliente de pulpo a la parrilla.
En la carta de La Cuadra de Salvador también hay platos con pescados y mariscos. Al frente, una ensalada caliente de pulpo a la parrilla.

Las terrazas se han convertido en el sello de autor de estos restaurantes y así es como está distribuido el espacio, con un menú pensado principalmente para compartir. “Si bien es cierto que LCDS siempre se ha especializado por tener carnes americanas de alta calidad”, explica Pedro Pablo Pazos, “en los últimos años estamos tratando de ampliar el concepto y agregar más platos: pastas, langostas, más entradas, como nigiris de entraña y salmón”, añade.

Los domingos hay cochinillo, acompañado de camotes al horno, ensalada de la casa y chutney de ají (hay que reservar con 48 horas de anticipación). La mejor recomendación es salir de lo convencional y darle rienda suelta al antojo: en el menú hay opciones suficientes, y no necesariamente tienen que ver con carne de res.

Kilo y medio de corte cowboy a la parrilla. Puede acompañarse de mantequilla de tuétano, salsa de pimienta, mantequilla de trufa blanca o salsa demi-glace.
Kilo y medio de corte cowboy a la parrilla. Puede acompañarse de mantequilla de tuétano, salsa de pimienta, mantequilla de trufa blanca o salsa demi-glace.

Parrilla para todos los gustos

  • El espacio de Chacarilla se suma a los locales de Barranco y San Isidro. La carta en los tres es, en principio, la misma. Reservas corporativas, comedores privados y terrazas abiertas marcan el diseño de los restaurantes de La cuadra de Salvador. El local de Chacarilla tiene, además, un garaje interior para facilitar el estacionamiento en la zona.
  • ¿Mejor para llevar? Si busca una experiencia más personal, pregunte por la venta de cortes congelados para preparar en casa. Entre ellos, entraña, picaña prime, T-bone, tomahawk, colita de cuadril y más.

Más información:

Dirección: Av. Primavera 1053, San Borja.

Contacto: 973-755320

Instagram:

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