Cinco útiles escolares que los niños peruanos de los 90 adoraban tener en sus mochilas.
Cinco útiles escolares que los niños peruanos de los 90 adoraban tener en sus mochilas.
Miguel Villegas

Esta es una nota para nostálgicos. Escolares nostálgicos que dibujaban con sus reglas Artesco del mapa del Perú. Escolares nostálgicos que dibujaban con sus reglas Artesco del mapa del Perú y verificaban los nombres en una Escuela Nueva. Escolares nostálgicos que dibujaban con sus reglas Artesco del mapa del Perú y verificaban los nombres en una Escuela Nueva, guardada en el Trapper Keeper. Escolares nostálgicos que dibujaban con sus reglas Artesco del mapa del Perú y verificaban los nombres en una Escuela Nueva, guardada en el Trapper Keeper, donde también iban uno detrás de otro las Láminas Huascarán.

—como yo— que dibujaban con sus reglas del mapa del Perú y verificaban los nombres en una Escuela Nueva, guardada en el Trapper Keeper, donde también iban uno detrás de otro las Láminas Huascarán. Y que ante un error —que es la esencia del —, tenían a mano un Liquid Paper.

El prototipo de Trapper Keepers, uno con el logotipo y otro sin él. Foto cortesía de E. Bryant Crutchfield.
El prototipo de Trapper Keepers, uno con el logotipo y otro sin él. Foto cortesía de E. Bryant Crutchfield.


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-Regla del Mapa del Perú-

La verde tenía el mapa del Perú de norte a sur, el abecedario a la mano derecha, los números del 1 al 9 besando Loreto y tres símbolos flotando en lo que sería el Océano Pacífico: dos triángulos y un polígono. La amarilla era más sofisticada: se podía dibujar con ella el mapa peruano y sus 23 departamentos y la provincia constitucional del Callao, además de los símbolos %, (), +-/ = entre otros. Era uno de esos bellos lujos que un estudiante de los últimos años de primaria y los primeros de secundaria podía darse, cuando le tocaban los cursos de Geografía y Geopolítica. Su nombre técnico era “Regla Plantilla Mapa Político de Perú Artesco 20 cm”, de plástico brillante fácilmente rompible, y se podía encontrar en todos las que inundaban la ciudad en los primeros días de marzo, durante los años 90. Hasta hace poco se vendían en Metro y por Mercado Libre. Hoy son una rareza.



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-Escuela Nueva-

El 18 de setiembre del 2015, el maestro de todos los niños de Primaria de los últimos 39 años, murió. Una rápida biografía diría que fue un Amauta (1), ese noble vocablo quechua con el que se bautizaba a los educadores en el Imperio de los Incas. Una más profunda, más actual, citaría sus condecoraciones: recibió Palmas Magisteriales en el grado de Gran Amauta el 2005 y Educador en 1986 de manos del Ministerio de Educación. Se llamaba Augusto Benavides Estrada y fue el fundador de la Editorial Escuela, en donde nació ese mítica enciclopedia que fue más que Google, bautizada con romaticismo Escuela Nueva.

En 2012, Escuela Nueva de profesor Benavides fue utilizada por los abogados chilenos ante la Corte Internacional con el propósito de probar que Perú aceptó límites marítimos paralelos con Chile. La periodista Andrea Amesquita lo entrevistó para RPP y el maestro dijo: “No es una prueba, es algo referencial, personal, para ayudar a que mis alumnos comprendieran cuáles podrían ser esos límites, nada más”.

Como sea, quienes ya cruzamos la frontera de los 40 años no conoceríamos nada del Perú de no ser por este libro.

(1) Del quechua: hamawt’a; ‘maestro’, ‘sabio’, eran llamados Amautas aquellas personas que se dedicaban a la educación formal de los hijos de los nobles y del Inca.

¿Quién no tenía una Escuela Nueva?
¿Quién no tenía una Escuela Nueva?
Las queridas Láminas Huascarán.
Las queridas Láminas Huascarán.

-Trapper Keeper-

También es coleccionista, experto buceador en librerías de viejo, y cazador de juguetes que le recuerden cómo era la vida sin Internet. Es mi amigo. Vade Retro es un viaje al pasado, un paseo por una parte de nuestra historia y también es su blog. Allí él ha recordado con precisión lo que era sin duda un objeto de culto para escolares de secundaria a inicios de los años 90: el Trapper Keeper.

Carpeta portátil o in(útil) para estar a la moda, el Trapper Keeper era un símbolo de status: no se vendía en cualquier lado y no lo tenía cualquiera. Salía en Salvado por la Campana (2), también en Family Guy, South Park, Full House, Stranger Things y Napoleon Dynamite.

El responsable de esta fiebre fue el señor norteamericano que era en realidad un oragnizador de tareas con hojas, compartimentos para tarjetas y tres anillos que permitían ordenar papeles, exámenes, cartulinas. Hasta el 2017 se habían vendido 75 millones. Y pensar que todo comenzó cuando un niño de 14 años llamado Fred cautivó a Crutchfield después de escribir un comentario tras recibir su primer Trapper: “Me sirve para guardar todos mis cachivaches”, sería la traducción más elegante de la nota publicada en .

(2) Traducción de Saved by the Bell, es una serie de televisión estadounidense que narra la vida y peripecias de seis adolescentes en el instituto Bayside (California). El protagonista era Zack Morris.

El soñado Trapper Keeper.
El soñado Trapper Keeper.

-Láminas Huascarán-

Mucho antes de colapsar Tambos para buscar figuritas de Panini, en el Perú se coleccionaban los Incas que venían en las Láminas Huascarán. Los Precursores de la Independencia Nacional. Los Próceres de la Patria. Las culturas preincaicas e Inca. Los Presidente del Perú. Los Recursos Naturales. Los Símbolos Patrios. , los padres de las Láminas Huascarán, reflexionan: “En el año 1945, don José Germán Lora Carrillo funda en el populoso distrito de La Victoria Láminas Huascarán: a nuestros 73 años de fundación decimos con orgullo que nos mantenemos firmes en nuestro compromiso con la educación en el Perú”. A su lado, una foto de don José, un hombre de corbata y breves bigotitos, cuyo ingenio hizo que la Historia del Perú y decenas de temas escolares cobren vida y otro color.


-Liquid paper-

Enano como un esmalte de uñas e invasivo como el célebre borrador azul para lapicero, el Liquid Paper era un instrumento para escolares en etapa secundaria que hacían lo que normalmente hacen los escolares en etapa secundaria: equivocarse. Ya se delante de una máquina de escribir, o con sus lápiceros Novo, el primer Liquid Paper tenía una brochita para barnizar los errores de blanco, del mismo tono en que se hace una manicure francesa. Un no menos polémico detalle se escondía en el frasquito: el olor a aguarrás.

Aunque estudios posteriores determinaron que el tricloroetano (TCE), componente utilizado como diluyente, no era tóxico ni cancerígeno, sí tuvo que ser retirado de la composición química del Liquid.

Igual, nadie que no haya sido en los años 90 puede olvidar el jingle: “Liquid Paper, el to-que-ci-to mágico, de gran ayuda...”





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