Cuando Walter Huamán (43) era niño, dejó una carta en el pozo de los deseos de Santa Rosa de Lima como parte de una excursión escolar. Al ser alumno del colegio de la Inmaculada, Jesuitas, sus visitas a la casa de Isabel Flores de Oliva eran más frecuentes que las del promedio. Más de una década después, regresa al claustro -desolado- como Walt Wizard [su nombre artístico] y con un homenaje particular: la escultura hiperrealista de la patrona de América, Filipinas y de las Indias Orientales. Dice que esta reconstrucción histórica de 1.60 m es el trabajo más importante en sus casi 15 años de trayectoria. Antes de retirarse, retoca detalles finales y, eso sí, no sin antes dejar una nueva carta en el pozo.
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El emprendedor -que le ha vendido estatuas de un realismo que maravilla a Sylvester Stallone, al magnate mexicano Carlos Slim, a Hulk Hogan y otras figuras de renombre- tenía interés en hacer efigies de personajes nacionales. “Hace unos tres años me di cuenta de que estábamos cerca al Bicentenario. Empecé a ver personajes -cuyas imágenes no han sido actualizadas- que más legado han dejado. Fue una iniciativa propia de hacer algo más actual y que sirva también como herramienta de estudio para que los más jóvenes puedan conectar mediante estas estatuas y así conocer más de estos personajes”.
En el camino se cruzó con el padre Enrique Ramírez, director del museo del Convento Santo Domingo (Cuzco) y principal impulsor de la reconstrucción forense de Santa Rosa de Lima. Al tener fuentes de primera mano, Walter empezó su investigación. Recurrió a un promedio de diez fuentes (entre terciarios de la Orden Dominica; crónicas; registros audiovisuales del año 45; conversaciones con Augusto Tamayo, director de Rosa Mística) siendo una pintura del italiano Angelino Medoro la que jugó un rol clave. “Es la que más aproximación tiene a Santa Rosa porque la hizo en su lecho de muerte. La pintura restaurada está en una zona del convento -en el Centro de Lima- que comúnmente no está abierta al público. También está el cráneo con la corona de rosas de metal. Ahí se ve el diámetro de su cabeza”.
Una vez que tiene las medidas, empieza a trabajar la estatua desde la parte interna hacia la externa. Cada arruga, poro, lagrimal, ceja, pestaña, vello y pelo es colocado por el equipo de Walt con un cuidado que se nota a metros de distancia, y mucho más de cerca. El material que usa es la silicona de grado médico, la misma que se usa para las prótesis. Al tacto, es lo más parecido a la piel humana. Para esta escultura se han tomado en cuenta detalles como el hábito religioso, el tocado, la capa, el estilo de la costura, los zapatos de la época. “Como artista hiperrealista trato de acercarme lo más que pueda a la realidad. Santa Rosa ayudaba a la economía de su familia tejiendo y trabajando la tierra. Eso se refleja en sus manos. Esos detalles, que parecen mínimos, están replicados”. El trabajo ha tomado alrededor de seis meses.
PROYECTO BICENTENARIO
En estos años de investigación, vale decirlo, también ha indagado en la vida de Miguel Grau, Francisco Bolognesi, José Abelardo Quiñones, el Señor de Sipán, entre otros. “He podido tener en mis manos la pantufla de Grau, que está en una bóveda de la Marina que así nomas no la ve el público. Eso me da una idea del tamaño de su pie. Hay un pedazo de su ropa que quedó del combate de Angamos. Su familia tiene la espada que usó el almirante en combate”.
Para el próximo año espera presentar los diez personajes del proyecto ‘Mi Perú. Tour hiperrealista’. Hasta el momento hay cinco estatuas en etapa de producción, siendo Santa Rosa la primera figura terminada. No descarta trabajar efigies de otros santos como San Martín de Porres y sueña con un gran museo hiperrealista de personajes de la Patria. Para ello, claro, tendrían que sumarse empresas e instituciones. El financiamiento es propio y todo se debe a su amor al arte. //
DATO
Debido a la crisis sanitaria, la Iglesia de Santo Domingo realizará una ceremonia virtual donde los fieles podrán apreciar -desde sus pantallas- la efigie de Santa Rosa de Lima. La cita es a partir del mediodía del 30 de agosto.