Liga contra el Cáncer: dos luchadores y una historia que te enseña a no rendirte

El 4 de marzo de 1981, Adolfo Dammert fue operado de unos ‘bultitos’ que encontró en su cuello mientras se ponía una corbata.Tres días después recibió la noticia que marcaría su vida: tenía cáncer. Adolfo era un hombre joven de 32 años y apenas tres meses antes había enterrado a su padre, que murió a causa del mismo mal que ahora le diagnosticaban a él. Para entonces, cáncer era sinónimo de muerte. No pudo evitar pensar en que sus hijos, de seis y cuatro años, se quedarían huérfanos.  

Pero el pensamiento le duró apenas unos segundos y nunca más permitió que vuelva a su cabeza. Adolfo, publicista de profesión, decidió que no se desmoralizaría y le daría una dura batalla al cáncer. Debía comenzar por su propio estado de ánimo.  

Por eso luego de que le practicaron la segunda y tercera operación, regresó a la oficina casi de inmediato. Incluso luego de que perdió la voz, debido al raspado que le hicieron del nervio que conecta el cerebro con las cuerdas vocales, Adolfo fue a trabajar y se hizo entender con gestos y señales. No estaba dispuesto a comenzar a perder su vida.  

El diagnóstico que le dieron los médicos fue cáncer a la tiroides. Cuando era niño, Adolfo se resfriaba constantemente, así que le habían extirpado las adenoides (una masa de tejido ubicada en la parte posterior del conducto nasal) mediante sesiones de radiación. Con el paso de los años, el 70 por ciento de las personas que fueron sometidas a ese tratamiento desarrollaron cáncer.  

Treinta y siete años han pasado desde aquel 4 de marzo y quien nos relata esta historia es el propio Adolfo. El publicista no solo pudo recuperar la voz después de un año de dura terapia, sino que hoy lleva ya siete años como presidente de la Liga contra el Cáncer.  

A Adolfo lo salvaron su determinación por vencer al mal y su disposición a recibir los tratamientos y operaciones que los médicos determinaron. Pero, sobre todo, lo salvó su decisión de vencer a sus propios miedos y acudir a un centro de salud apenas pasados unos días desde que encontró el famoso ‘bultito’. El cáncer a la tiroides es lento en desarrollarse, pero es tan mortal y agresivo como otros tipos de cáncer si no es detectado de forma temprana.  

Y como presidente de la Liga contra el Cáncer, esa es –precisamente– su prédica: la detección temprana. Se estima que cada año ese organismo atiende a 300 mil personas, de las cuales unas 8 mil tendrán un diagnóstico de cáncer.  

“El propósito de la Liga es encontrar el cáncer a tiempo. Buscamos captar a personas que se sientan sanas en nuestros 16 centros detectores que tenemos en todo el país o en las 6 unidades móviles para que, de ser el caso, estas personas reciban un tratamiento oportuno”, dice Dammert.  

Gianna Velarde tiene 24 años y, a su corta edad, es también una sobreviviente del cáncer. Tenía apenas 15 años cuando, bromeando con sus amigas, alguien la fastidió por “esa tremenda bola que tienes en el cuello”. Ella se asustó y lo mismo pasó con su abuela, que durante algunos días le dio cápsulas de amoxicilina para ver si hacían el milagro.  

Felizmente, ni Giana ni su abuela se desentendieron del asunto. Después de un breve paso por una clínica local, decidieron ir directamente a Neoplásicas, donde finalmente se diagnosticó a Gianna: la muchacha tenía linfoma no-Hodgkin, un tipo de cáncer que se inicia en los linfocitos.  

Gianna tuvo que ser sometida a 16 sesiones de quimioterapia y 32 radioterapias. “Fue como si durante siete meses me metieran a un microondas y apretaran: potencia alta”, dice ella, hoy dispuesta a convertirse en la primera mujer que termine en moto la competencia Dakar.  

De hecho, la moto es un elemento clave en esta historia. Gianna cuenta que, cuando le detectaron el cáncer, pasaba por una fuerte etapa de depresión. Le molestaba, además, que la enfermedad la hubiese convertido en una “víctima de la vida”. Sentía que todos la miraban con pena. Así que un día, sin que nadie supiera, su papá la llevó a manejar moto.  

“Es el punto de partida. A partir de que conocí la moto, me comencé a convertir en otra persona; aprendí una filosofía: puedes caerte intentando subir un cerro [con moto], pero lo vuelves a intentar una segunda vez con más fuerza y con mayor conocimiento. Para mí el cáncer fue como el cerro y me dije: ‘Tienes dos opciones: o eres víctima o eres luchadora’. Yo elegí ser una luchadora”, cuenta Gianna.  

Estas son historias de hombres y mujeres que vencieron el cáncer, pero en general las cifras aún no son alentadoras: en el Perú cada año se detectan 60 mil nuevos casos de cáncer. De ellos, 40 mil no sobrevivirán. De ahí la importancia de la prevención y la detección temprana. 

Este 5, 6 y 7, apoya a la liga

• El 5, 6 y 7 de setiembre, la Liga contra el Cáncer realizará su Colecta Pública Nacional 2018, la cual tiene como objetivo recaudar fondos para que la institución continúe realizando acciones de prevención en la población menos favorecida. 
  
  
• Con ese fin, 35 mil alcancías serán repartidas a nivel nacional. Los aportes también se podrán hacer en los cajeros y agentes BCP a través de la cuenta corriente ‘LIGA CÁNCER’ (cuenta corriente soles Nº 193-1101888-0-80 y cuenta corriente dólares Nº 193-2275597-1-36).