Decenas de personas envían sus peticiones (escritas o en audio), como las de la imagen, al WhatsApp de Santa Rosa (ver número en siguiente página). Pueden tardar hasta 10 días en responder. Eso sí, no dejan a nadie en visto.
Decenas de personas envían sus peticiones (escritas o en audio), como las de la imagen, al WhatsApp de Santa Rosa (ver número en siguiente página). Pueden tardar hasta 10 días en responder. Eso sí, no dejan a nadie en visto.
Vanessa Cruzado Alvarez

En 1998, los devotos de empezaron a enviarle sus peticiones, desde cualquier parte del mundo, vía correo electrónico. Hoy, la Patrona de Perú, América y Filipinas tiene cuenta de Facebook, Twitter, Instagram, WhatsApp e incluso una aplicación para Android.

En el colegio nos hablaron de una santa limeña que cumplía milagros si se lo pedían. Todo lo que necesitábamos era lápiz, papel, un sobre y un deseo puro, de corazón. Luego debíamos ir a su casa, en la avenida Tacna 100, en el Centro de Lima, y arrojar la carta a un pozo de aproximadamente 20 metros de profundidad. Real o no, hay quienes aún realizan esta peregrinación, en especial cada 30 de agosto, día de Isabel Flores de Oliva, conocida religiosamente como Santa Rosa de Lima. Hoy en día, hay otras formas de ‘comunicarse’ con ella: mediante redes sociales. Sí, como leyó. La peruana más ilustre de Hispanoamérica está en Facebook, Twitter, Instagram y, ahora último, en WhatsApp. Aunque su transición a lo digital no es reciente.

En agosto de 1998, el sacerdote diocesano Miguel Ángel Vassallo tuvo la iniciativa personal de crear un correo electrónico (santarosa.correo@gmail.com) para que aquellos que vivían en el extranjero, en provincia o que, por motivos de salud, no podían acercarse al santuario, enviasen sus peticiones. Luego él las dejaría en el pozo. Desde entonces, junto al grupo pastoral Voluntarios de Santa Rosa, realiza un trabajo que, en estos tiempos de egos e individualismo digital, parece una rareza: escuchar –y responder– al prójimo.

-SANTAS REDES-
Once años después apostaron por un nuevo espacio para compartir oraciones, novenas o actividades en torno a la patrona de Perú, América y Filipinas. En su mes, crearon una página en Facebook, que hoy supera los 110 mil likes. La fórmula funcionó y, a mediados del 2015, abrieron una cuenta de Instagram, enfocada en los más jóvenes, que ya tiene dos mil seguidores y va en aumento. Como querían una comunicación más directa, dos años después, abrieron el WhatsApp de Santa Rosa. 

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