Constantes arrebatos son registrados con cámaras de vigilancia en Surco que vienen circulando en grupos de WhatsApp y Facebook. (Foto: Captura de Pantalla)
Constantes arrebatos son registrados con cámaras de vigilancia en Surco que vienen circulando en grupos de WhatsApp y Facebook. (Foto: Captura de Pantalla)
Sergio Sicheri

Ayer alistábamos nuestra lonchera (en la mañana) en casa, antes de partir al trabajo y en la cochera que está al frente de nuestro edificio (en la calle), desmantelaron un auto. Sucedió durante la madrugada. La imagen de la dueña del vehículo, caminando de un lado a otro y conversando con su seguro vehicular por el celular, mientras que los serenos y vecinos observaban el hecho… se ha convertido en una figura repetida. Literal, del día a día. Y los vecinos surcanos, lamentablemente nos hemos acostumbrado a ver estas imágenes —he contado de dos a tres veces a la semana—, a través de los distintos grupos que se han creado en WhatsApp y en Facebook. Sí, como

Por si fuera poco, por la tarde-noche, cuando retornábamos del trabajo, a media cuadra habían desmantelado otro auto de la misma marca y manera. Sé que la ola de asaltos que viene atravesando  no es una problemática de solo , pero entiendo… en líneas generales, que en Surco se vienen incrementando estos arrebatos. Las constantes noticias y las redes dan fe de ello. Es más, hasta hace poco en la mayoría de los informes, Surco no entraba en la lista de los distritos más picantes de Lima y si lo hacía estaba al final de la tabla. Hoy debe de haber repuntado entre los seis que la encabezan. Y para quienes no lo recuerdan, unos días antes de las elecciones municipales del año pasado, escribí  en la que destacaba la importancia del trabajo en seguridad ciudadana. Manifesté y sigo pensando hasta hoy que debería de ser uno de los principales temas a tratar y revisar en la agenda diaria de los municipios. Sobre todo, por el peligroso momento que estamos viviendo en nuestra ciudad. 

También soy de los que piensan que la tecnología es uno de los mejores conductores para poder controlar los actos delictivos. Cuando la empresa de las alarmas  inició sus operaciones en nuestra capital, ganó parte del mercado con facilidad porque otras compañías del mismo rubro y con más trayectoria se habían quedado dormidas en sus laureles. Sí, facturando tranquilas todos los meses y dejaron de ser disruptivas. No innovaron sus servicios. Recuerdo que en mi grupo de amigos fui uno de los primeros en optar por su sistema de alarmas debido a que el servicio de monitoreo interno del domicilio con cámaras fotosensibles, sumados a un curioso llavero o dispositivo para desbloquear la alarma, otro con un botón de pánico, un aplicativo para poder activar o desactivar la alarma desde cualquier lugar con acceso a Internet y el poder solicitar fotografías para cerciorarse de que todo andaba bien en casa… fueron alguno de los puntos clave que me llevaron a optar por sus servicios. 

Me imagino que las empresas dedicadas a vender este tipo de dispositivos deben de estar rayando en la actualidad. Uno de los mejores consejos es resguardar tu hogar con tecnología y también protegerla, ante la misma. Si alguien no puede optar por un servicio mensual, le recomiendo la minicámara de vigilancia de la empresa taiwanés  que hace poco empezó a venderse en nuestro país y que cuenta con grabación directa en la nube. Hace poco tuve la suerte de utilizarla y la verdad es que con ella puedes tener tu propio sistema de videovigilancia en el hogar y sin generar tantos costos como los mencionados en el anterior párrafo. Además, no depende mensualmente de una empresa que te brinde dicho servicio. Utilicé la  de D-Link, una cámara muy pequeña (de 9 cm de altura), ligera y con una excelente resolución (HD 720p) y audio. Me sorprendió su sensibilidad para empezar a grabar ante cualquier movimiento (120 grados y zoom digital de 4x). Si usted es de los que sale temprano de casa y regresa muy tarde del trabajo, con esta camarita que se conecta mediante un aplicativo a su teléfono podrá saber quien entra y sale de su cuarto o casa, a qué hora lo hacen y podrá escuchar y visualizar en vivo todo lo que sucede. 

Si bien equiparse tecnológicamente ayuda bastante. De por sí, las cámaras de vigilancia funcionan como un elemento disuasivo, además, sirven para revisar cuando se cometen faltas en el edificio o casa. Por ejemplo, ver quién dejó la reja o puerta abierta y pasar a corregir. Además, hay otras conductas que podemos aplicar, como comenta Jose Ignacio Bernal, director de  en Perú: “me parece válido que en algunos edificios no estén dejando ingresar hasta el domicilio al delivery. Por protección, sobre todo ahora que hay una ola anormal de delincuencia que ojo, no es solo por delivery… que la gente tome sus propias medidas en sus edificios. De hecho, en Argentina, Rappi no puede subir a los edificios. Por esto pasa más por un tema de seguridad y eficiencia en entrega por el tema de edificios corporativos que es casi imposible hacer ingresar al delivery”. 

Por su parte, el country manager de , Drago Macan, señaló ante las constantes  que se les vienen imputando a sus ‘Glovers’ (motorizados delivery), que “los robos siempre han existido, que lo hagan ahora con una moto o con un BMW, al final es lo mismo. Son problemas de seguridad interna que nosotros estamos dispuestos a colaborar si es que existiera alguna relación directa con nosotros. Pero no la ha habido. También somos víctimas de esto porque venden nuestros materiales por las redes. Pero nosotros no somos el Estado. Podemos ayudar… al final lo que hace Glovo es formalizar trabajadores, no formamos delincuentes. Ojo, no hemos tenido ni un solo caso de estos”. 

Si bien ambos ejecutivos señalan que sus trabajadores pasan por un riguroso proceso (como presentar antecedentes policiales) para poder formar parte de sus empresas de delivery. Asimismo, contar con todos los datos de sus trabajadores, que además están bancarizados, pagan impuestos, detracciones, etc. Ambos manifiestan que el problema es más grande y pasa por un tema de formalización. Creo que si no existieran compradores o lugares donde vendan repuestos de autos robados, tampoco les hubieran desmantelado el auto a mis vecinos. Las autoridades tienen mucho trabajo por delante. 

*Sergio Sicheri se desempeña como Jefe del Núcleo de Audiencias del Grupo El Comercio, es gerente general de / (asesoría en imagen de marca y soluciones digitales). Cuenta con una maestría en Dirección de Marketing y Gestión Comercial en el EOI de España y la escuela de postgrado de la UPC. Ha dictado cursos de marketing digital en la universidad Mayor de Chile, la universidad Científica del Sur y en ISIL.

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