El Gobierno de EE.UU. pidió a las grandes compañías tecnológicas con sede en California ayudar a impedir que los terroristas usen Internet con el fin de promocionar sus mensajes y atraer reclutas.Seguir a @tecnoycienciaEC !function(d,s,id){var js,fjs=d.getElementsByTagName(s)[0],p=/^http:/.test(d.location)?'http':'https';if(!d.getElementById(id)){js=d.createElement(s);js.id=id;js.src=p+'://platform.twitter.com/widgets.js';fjs.parentNode.insertBefore(js,fjs);}}(document, 'script', 'twitter-wjs');
Las autoridades también anunciaron iniciativas contra el extremismo violento, incluso una reforma total a su campaña para contrarrestar los mensajes que envían los grupos radicales por todo el planeta a través de la web.
En Silicon Valley, funcionarios del gobierno se reunieron a puertas cerradas con el CEO de Apple, Tim Cook, y ejecutivos de Google, Facebook, Yahoo y otras empresas de tecnología. Aunque la reunión fue descrita como cordial, no se anunció ningún acuerdo específico.
“Este encuentro confirmó que estamos unidos en nuestro objetivo de impedir que los terroristas y sus mensajes de promoción del terrorismo lleguen a la Internet”, dijo Facebook en un comunicado. Voceros de las demás empresas se abstuvieron de formular declaraciones.
Entretanto, un portavoz de la Casa Blanca calificó a los ejecutivos de estas empresas como patriotas que no están dispuestos a dejar que “sus herramientas y su tecnología sean usadas para ayudar y apoyar a terroristas”:
Los funcionarios del Gobierno de EE.UU. que estuvieron en la reunión a puerta cerrada incluían a la secretaria de Justicia Loretta Lynch, el jefe de gabinete de la Casa Blanca Denis McDonough, la asesora en temas de terrorismo Lisa Monaco, y Megan Smith, una ex ejecutiva de Google que ahora es la principal asesora del gobierno en temas de tecnología.
La participación de funcionarios de alto rango señala que la lucha contra la propaganda terrorista por red es una de las máximas prioridades del presidente Barack Obama, dijo el portavoz presidencial Josh Earnest. Añadió que no esperaba un anuncio importante ni un gran acuerdo de estas reuniones.
El Gobierno de EE.UU. desea que las empresas tecnológicas ayuden a evitar que los extremistas encuentren “refugio” en la red mundial, y que las compañías ayuden a “crear, transmitir y promocionar” mensajes que refuten la propaganda de los elementos extremistas, indicó Earnest.
Las principales empresas de Internet aseguran que bajan todo mensaje que viole sus políticas al promover el terrorismo o las amenazas de violencia, pero al mismo tiempo son renuentes a aplicar medidas que puedan ser interpretadas como violatorias a la libertad de expresión.
Además, evitan ser consideradas como agentes del gobierno de Washington y han rechazado las quejas de funcionarios oficiales por negarse a permitirles penetrar programas cifrados en que se almacenan mensajes u otros contenidos de sus clientes.
Pese a ello, Earnest afirmó que “nuestra opinión es que es posible llegar a un acuerdo... Tenemos la esperanza de que ellos tendrán la voluntad de cooperar con nosotros y de hallar soluciones”.
Fuente: AP