(Foto: Centro Médico Wexner)
(Foto: Centro Médico Wexner)
Redacción EC

Órganos enfermos se curarán completamente. Vasos sanguíneos dañados se repararán. Solo bastará con aplicar una leve descarga eléctrica a un chip, que estará colocado en el área dañada del cuerpo. No estamos describiendo una historia de ciencia ficción, sino una real.

Especialistas de la Universidad Estatal de Ohio (EE.UU.) han desarrollado un nuevo tipo de nanotecnología, llamada nanotransfección de tejidos, capaz de hacer que células adultas cambien de función. De esta forma, los médicos obtienen las células necesarias para que el cuerpo del paciente se recupere por su cuenta.

Los expertos usaron este desarrollo para curar a ratones que tenían vasos sanguíneos bloqueados. La tecnología transformó las células de la piel de los roedores en células vasculares. A la segunda semana, los animales estaban completamente curados, sin la necesidad de una intervención médica.

-¿Cómo funciona?-

La nanotransfección de tejidos tiene dos elementos principales: un chip diseñado para entregar una carga genética específica a las células, y la carga en sí, la cual es la responsable de reprogramar a las células. Solo es necesario aplicar una leve descarga al chip -que estará colocado en la piel- para liberar su contenido.

"Solo toma una fracción de segundo. Simplemente toque el chip en el área herida, y luego retírelo", dijo Chandan Sen, director del Centro de Medicina Regenerativa y Terapias Basadas en Células del Centro Médico Wexner, de la Universidad Estatal de Ohio. "En ese momento, comienza la reprogramación celular", agrega.

El especialista explica que mediante la pequeña corriente eléctrica se crean canales en el tejido del cuerpo, por los cuales se inyecta la carga genética (ADN o ARN). Luego de eso, el proceso de reprogramación celular comienza.

Este innovador procedimiento -que fue publicado en la revista especializada "Nature Nanotechnology"- demostró ser eficaz en el 98% de los casos. Además, al utilizar las propias células del paciente, no es necesario el uso de medicamentos. Los expertos esperan empezar las pruebas en humanos dentro de un año.

Cabe resaltar que los investigadores fueron capaces también de cultivar células cerebrales en la superficie de la piel de un ratón que había sufrido un accidente cerebrovascular. Una vez cosechadas, se inyectaron en el animal. Luego de algunas semanas, sus funciones cerebrales estaban restauradas.

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