Luna de Sangre vista desde Alemania. (AP)
Luna de Sangre vista desde Alemania. (AP)
Redacción EC

La Luna se tiñó el 27 de julio de rojo cobrizo en un fenómeno conocido como de sangre. Esto sucedió durante el eclipse lunar más largo del siglo, que también pudo seguirse en EN VIVO a través de Internet.

Sin embargo, no fue el único fenómeno astronómico del día. Mientras nuestro satélite se teñía de rojo, el planeta Marte, casi en su punto más cercano a la Tierra, brilló con todo su esplendor.

El doble espectáculo pudo observarse a simple vista, sin necesidad de protección como ocurre con los eclipses de Sol.

El eclipse de Luna de Sangre (incluida la fase de penumbra) comenzó a las 17:14 horas GMT (12:14 p.m. en el Perú) y concluyó a las 23:28 horas GMT (6:28 p.m. en el Perú).

El espectáculo inició realmente a las 18:24 GMT (1:24 p.m.). El momento más cautivador del eclipse, es decir, cuando la Luna estuvo completamente en el cono de sombra proyectado por la Tierra, tuvo lugar a las 19:30 GMT (2:30 p.m.) y terminó a las 21:13 GMT (4:13 p.m.). Esta fase "total" duró 1 hora y 42 minutos (102 minutos), convirtiéndolo en el eclipse lunar más largo del siglo XXI.

Revive el eclipse lunar más largo del siglo XXI:

El eclipse fue visible total o parcialmente en medio mundo: África, Europa, Asia y Australia. Pero fue en el este y el sur de África, Oriente Medio e India donde mejor se apreció el espectáculo.

No pudo verse en Norteamérica, América Central y solo parcialmente en América del Sur. No obstante, hubo varias transmisiones EN VIVO a través de Internet.

Este es el segundo eclipse total de Luna de 2018. El primero tuvo lugar el 31 de enero.

El eclipse de Luna más largo del siglo XXI. (AFP)
El eclipse de Luna más largo del siglo XXI. (AFP)

(Si quieres ampliar la infografía anterior, )

El color rojizo que adoptó la Luna, por lo cual el fenómeno recibió el nombre de eclipse de Luna de Sangre, se explica por el hecho de que la atmósfera terrestre desvía los rayos rojos de la luz solar hacia el interior del cono de sombra, y la Luna puede reflejarlos.

Según las condiciones atmosféricas y, especialmente, la contaminación, la Luna pudo adquirir un gris rojizo muy oscuro, o teñirse de un rojo más intenso si no encontraba partículas en la atmósfera.

--- Marte, el otro protagonista ---

El otro protagonista de la noche fue el planeta Marte, que debía situarse a 57,6 millones de kilómetros de la Tierra.

A simple vista pudo apreciarse un punto brillante en el espacio pero con un telescopio fue posible apreciar sus detalles.

Habrá que esperar hasta 2035 para volver a ver al 'Planeta rojo' tan cerca de nosotros.

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