¿Cuál es la diferencia entre infertilidad y esterilidad?

Se calcula que el 15% de parejas que buscan una gestación tienen problemas de esterilidad. (Foto: Shutterstock)

02/12/2020 11H47

Parecen conceptos similares, pero no lo son. Infertilidad y esterilidad son términos usados generalmente cuando hablamos de las dificultades a la hora de concebir. Sin embargo, hay marcadas diferencias entre ambos. “No es lo mismo hablar de una pareja infértil que de una pareja estéril”, sostiene Javier Ascenzo Aparicio, ginecólogo y especialista en fertilidad asistida de la Clínica Miraflores, y past president de la Sociedad Peruana de Fertilidad.

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La esterilidad se denomina a la incapacidad de una pareja para conseguir un embarazo de manera natural en el plazo de un año. Se calcula que el 15% de parejas que buscan una gestación tienen problemas de esterilidad.

En cambio, la infertilidad se refiere a la imposibilidad que tienen algunas parejas para conseguir finalizar la gestación de manera satisfactoria. “Muchas mujeres logran gestar, pero no llegan a la implantación y se producen abortos. Son personas que suelen perder bebes. Ahí es donde hablamos de infertilidad”, explica el experto.

Gracias a los avances en medicina reproductiva, miles de parejas tienen solución a sus problemas de esterilidad e infertilidad. Los especialistas deben estudiar cada caso y realizar una serie de pruebas diagnósticas para conocer las causas que impiden conseguir un embarazo.

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“La llamada Hormona Antimulleriana (AMH) es una de las principales pruebas que se hacen, pues mide la cantidad de óvulos de los que dispone una mujer en un momento determinado, así como la calidad de los mismos. Es una prueba sencilla de sangre. Una baja reserva ovárica puede ser una de las principales causas de infertilidad femenina”, sostiene por su parte la ginecóloga y especialista en fertilidad, Rosario Villarán Ascenzo.

Una vez realizado el diagnóstico, el especialista en fertilidad a cargo debe realizar las recomendaciones sobre la mejor opción de tratamiento. “Hay tratamientos de baja complejidad como la inseminación intrauterina, y otros de alta complejidad como la Fecundación in Vitro (FIV), la Inyección Intracitoplasmática de Espermas Fisiológico (PICSI) o la Transferencia de Ovocitos Microinyectados (TOMI). Este último es un procedimiento que se creó exclusivamente en el Perú, y ya se viene practicando con éxito en varios países”, sostiene Javier Ascenzo.

Las personas o parejas que buscan tener hijos deben tener en cuenta algunos elementos que podrían limitar sus posibilidades de lograr el ansiado embarazo. La edad de la mujer es un factor clave, por ejemplo. Mujeres a partir de los 35 años con una mala calidad de óvulos podrían verse afectadas. Lo mismo las mujeres que tienen antecedentes de dos o más abortos.

Sumado a esto, las parejas con enfermedades genéticas o que se han sometido a procesos de esterilización, como la vasectomía y la ligadura de Trompas. “Hay que estudiar además si hay anomalías del útero, como miomas; anomalías del endometrio, obstrucción de las Trompas, baja calidad del moco cervical, o si hay ausencia o un bajo conteo de espermatozoides en el semen del varón. Todos estos factores son determinantes cuando se quiere tener un hijo. Por ello, es muy importante que las parejas acudan a centros especializados en fertilidad para poder recibir la ayuda que necesitan”, afirma el también director de la Clínica Miraflores.

DATOS:

- Cada mujer nace con una reserva ovárica de entre uno y dos millones de óvulos, la cual va disminuyendo a medida que pasa el tiempo. Cuando viene la menstruación, se cuentan unos 400.000 óvulos. A los 35 años, apenas tiene el 10% de esa reserva.

- Estudios demuestran que la concentración de esperma y su calidad han disminuido en más del 50% en todo el mundo, y sigue cayendo debido a factores como el estrés, la obesidad, el tabaco y la exposición a contaminantes.