Los hoteles más románticos del Perú para una escapada en pareja

Aquí, una selección de los hoteles más románticos del país para un fin de semana inolvidable.

Miraflores Park, Belmond - Lima

Ubicado en el corazón de Miraflores, el hotel Miraflores Park de la cadena Belmond es, probablemente, uno de los más románticos de toda la capital. Su privilegiada vista del mar pacífico crea un ambiente romántico e inolvidable para quien lo visite. El hotel combina sofisticación y calidez.

Las habitaciones y suites del Belmond Miraflores Park están diseñadas para fusionar confort y elegancia, con ventanales de piso a techo que enmarcan la inmensidad del océano. Sus exclusivas Signature Suites, las más lujosas del hotel, ofrecen un espacio privado con sala, comedor y una terraza con piscina propia, perfecta para disfrutar del atardecer sobre el Pacífico. Para una experiencia aún más relajante, la piscina infinita en la azotea brinda vistas panorámicas inigualables, mientras que el spa Zest invita a la desconexión total con tratamientos diseñados para revitalizar cuerpo y mente.

La experiencia gastronómica es otro de sus grandes atractivos. Tragaluz, su restaurante insignia, es una oda a la alta cocina con una carta que fusiona sabores peruanos e internacionales en un ambiente sofisticado. Para un momento más distendido, el Belo Bar ofrece cócteles de autor ideales para acompañar el atardecer.

Tree House Lodge, Iquitos

En medio de los árboles en la abundante selva peruana, se encuentra una joya turística que ofrece lujo y conexión con la naturaleza. Ubicado a solo unas horas de Iquitos, este hotel ofrece una experiencia única: dormir en casas construidas sobre los árboles, suspendidas a más de 10 metros de altura. Desde cada cabaña, la vista es un espectáculo constante de vegetación exuberante y sonidos de la selva.

“Nunca olvidará la experiencia de ver monos y pájaros a la altura de los ojos, ya que cada mañana se despertará con un safari de vida animal antes incluso de salir de la cama“, se lee en su página web.

Y es que las 12 casas en los árboles han sido diseñadas para fusionarse con el entorno sin sacrificar comodidad. Cada una cuenta con una cama protegida por mosquiteros, terrazas con vista panorámica y baños privados con agua fresca de manantial. La iluminación funciona con energía solar, manteniendo la armonía con el ecosistema. Los espacios comunes incluyen un restaurante rústico donde se sirven platillos elaborados con insumos locales y una red de pasarelas elevadas que conectan las cabañas entre sí, permitiendo desplazarse sin tocar el suelo.

Más que un simple alojamiento, Treehouse Lodge ofrece una inmersión total en la Amazonía. Los huéspedes pueden navegar por ríos serpenteantes en búsqueda de delfines rosados, recorrer la selva con guías expertos para avistar fauna exótica o participar de caminatas bajo la luna.

Belmond Las Casitas, Cañon del Colca Arequipa

Arequipa es un destino ideal para visitar en pareja. Sus cálidas calles, imponente paisajes y distintas experiencias de aventura ofrecen al viajero una travesía inolvidable. En el Cañón del Colca, se ubica el hotel Las Casitas, de la cadena Belmond. Se trata de un refugio exclusivo donde la naturaleza y el lujo conviven en perfecta armonía. Cerca a uno de los volcanes más profundos del mundo, este hotel boutique ofrece un escape incomparable para quienes buscan tranquilidad y conexión con el entorno. Rodeado de terrazas andinas, vegetación exuberante y vistas panorámicas del valle, cada rincón invita a desconectarse del mundo y sumergirse en la serenidad del Colca.

Las 20 casitas privadas del hotel han sido diseñadas para brindar comodidad sin perder el encanto rústico de la zona. Espacios amplios con techos altos, chimeneas de leña y terrazas privadas con piscina climatizada crean un ambiente acogedor y exclusivo. Las habitaciones cuentan con baños de mármol, pero también con duchas al aire libre para conectar al máximo con la naturaleza.

Para quienes buscan relajarse, el Samay Spa ofrece masajes inspirados en tradiciones andinas, utilizando ingredientes naturales como hierbas locales y sales del Colca. Además, los huéspedes pueden disfrutar de la huerta orgánica del hotel, donde se cultivan insumos frescos que luego se convierten en exquisitas creaciones gastronómicas en el restaurante Curiña.

Gracias a su increíble ubicación, en Las Casitas ofrecen experiencias inolvidables como cabalgatas en el valle, sesiones de alimentación a alpacas o llamas o avistamientos de cóndores en el Cañón del Colca.

DCO, Máncora Piura

Frente al provocador mar de Máncora, se encuentra Suites, Lounge & Spa. Este hotel boutique, diseñado para quienes buscan privacidad y sofisticación, combina arquitectura minimalista con un gran servicio y gastronomía norteña de primera. Su ubicación privilegiada permite disfrutar del sonido de las olas y puestas de sol impresionantes, convirtiéndolo en el escenario perfecto para una escapada romántica.

El hotel es ideal para parejas. Cada una de sus suites ha sido pensada para maximizar la privacidad, con terrazas exclusivas y camas king-size. La piscina infinita frente al mar se funde con la vista del océano, mientras que el DCO Spa ofrece rituales de relajación con ingredientes naturales como coco, mango y sal marina. En el restaurante DCO Restaurant & Lounge, la gastronomía es una experiencia en sí misma: ceviches fresquísimos, pescados recién salidos del mar y cócteles tropicales que capturan la esencia del verano eterno.

Al caer la noche, el hotel organiza cenas a la luz de las velas, con el sonido del mar como único acompañante, con previa reserva. DCO no es solo un hotel, es un refugio diseñado para vivir el romance con la brisa marina como testigo.

Titilaka, Lago Titicaca Puno

Ahora puedes pasar un fin de semana inolvidable junto a tu pareja en el Lago Titicaca. Una de las mejores opciones para dormir frente al lago navegable más alto del mundo es Titilaka. Ubicado en la orilla sudeste del Lago Titicaca, este hotel se encuentra en una tranquila península compartida con la comunidad indígena Aymara.

El hotel cuenta con 18 habitaciones frente al lago ofreciendo una vista incomparable del paisaje altiplánico y una atmósfera romántica y calmada. Cada detalle ha sido pensado para ofrecer confort sin perder autenticidad: desde las mantas de fibra de alpaca hasta los baños de piedra con calefacción. En las áreas comunes, la sala de lectura y las terrazas exteriores con plataformas sobre el lago invitan a disfrutar de la quietud del lugar, mientras que el restaurante, con una propuesta de alta cocina peruana, resalta los sabores locales con ingredientes frescos de la región. También se puede encontrar una bodega bien surtida con la mejor selección de vinos regionales. Al caer la noche, una copa de vino junto a la chimenea cierra la jornada con el cielo estrellado como telón de fondo.

Los huéspedes pueden recorrer sus aguas en kayak o velero, visitar las islas flotantes de los Uros y compartir con comunidades locales que mantienen vivas sus tradiciones ancestrales. Para los más aventureros, caminatas por los senderos del altiplano revelan paisajes imponentes y miradores naturales desde donde se puede contemplar la vastedad del lago. Aquí, el tiempo se detiene y cada experiencia se convierte en un viaje a la esencia más pura de los Andes peruanos.