Manteniendo la distancia social, los pocos familiares que pueden asistir al entierro, escuchan entre lágrimas al sacerdote pidiendo por el descanso de las vícti
Manteniendo la distancia social, los pocos familiares que pueden asistir al entierro, escuchan entre lágrimas al sacerdote pidiendo por el descanso de las víctimas del COVID-19. Recordemos que la pandemia del coronavirus ha acabado con la vida de más de tres mil personas en el Perú. [Fuente: América TV]