Hacer ejercicios no es fácil. Muchas veces dejamos que la flojera nos gane y perdemos la motivación al no ver resultados o tener “otras cosas que hacer” en lugar de hacer actividad física.
Pero, aunque nos cueste a diario, notar los cambios en nuestro cuerpo y estilo de vida son la mejor forma de motivarnos para seguir con el ejercicio y alcanzar las metas que nos hemos propuesto. Es un trabajo constante y de perseverancia.
Estas son ocho motivaciones que te ayudarán cada vez que pierdas las ganas de hacer ejercicio.