De nuestras madres heredamos y aprendemos mucho. Son el primer ejemplo que tenemos en nuestra vida, por eso desarrollamos un vínculo especial con ellas y su amor es incondicional.
Incluso en la moda, esta relación entre madre e hija es muy fuerte pues son el modelo más cercano y nosotras podemos llegar a inspirarlas. Eso ocurrió con Jeanne-Marie Lanvin, fundadora de la prestigiosa marca Lanvin, que dio sus primeros pasos creando ropa para su hija Marguerite en 1895.
Siguiendo con esta inspiración de complicidad entre madre e hija, la última campaña de la marca las reúne posando con trajes similares en glamorosas imágenes. Algunas divertidas y otras muy elegantes, la química entre madre e hija salta a la vista en estas fotos como un tributo a las enseñanzas de las mamás en todos los aspectos de nuestra vida.