(Foto: Shutterstock)
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Redacción EC

La causa más importante del envejecimiento prematuro de nuestra piel es la radiación solar. “Durante el verano la recibe la exposición al sol de forma directa o indirecta, lo que le hace perder elasticidad, luz, hidratación y acelera su envejecimiento cronológico”, explica Jocy León, especialista en medicina estética y directora de Beauty Clinic.

En otoño e invierno la piel también se enfrentará a otros agentes climáticos por lo que, primero, hay que ‘restaurarla’ de los excesos del sol, cloro y sal ocasionados durante el verano. 

A continuación, la especialista de Beauty Clinic explica los tratamientos para la piel más adecuados para realizar en esta época del año. De todos modos, recuerda consultar a un dermatólogo antes de empezar cualquier tratamiento pues todos los rostros tienen necesidades distintas. 

1. Limpieza facial profunda.

En cualquier estación del año, uno de los aspectos claves para lucir una piel perfecta es la limpieza facial. 

Sin embargo, “es aconsejable realizar una limpieza facial profunda en esta época para ayudar a eliminar suciedad, impurezas acumuladas, puntos negros y células muertas que se hayan gestado durante el verano”, explica la especialista. 

Como resultado, la piel recupera su luminosidad y vitalidad, previniendo el envejecimiento prematuro de la misma.

2. Hidratación con ácido hialurónico.

Si la piel del rostro necesita hidratación intensa, “la técnica más indicada es la mesoterapia con ácido hialurónico, que estimula la producción de colágeno y elastina", asegura la experta.  

Se inyecta la sustancia en las capas más superficiales de la piel. El tratamiento es sencillo, inmediato e indoloro y los tejidos recuperan elasticidad, firmeza y luminosidad”, detalla León.

3. Adiós a las manchas y a la piel opaca.

El otoño es la época idónea si es que se desea atenuar o eliminar las manchas que el sol, el cloro, cambios hormonales o la maternidad hayan dejado en nuestra piel.

Para ellas, lo mejor son los tratamientos láser, que nos ayudan a eliminarlas de manera muy eficaz y rápida. Además, ''la mejor solución para recuperar el tono y la luminosidad del rostro es hacer un tratamiento despigmentante en otoño, es decir, cuando la piel descansa de los efectos del sol''.

En esta temporada del año se puede recurrir a otro tratamiento como el peeling químico que consiste en limpiar la piel con productos químicos que renuevan la capa celular, eliminando todas las células muertas y promoviendo la aparición de otras nuevas y de mejor calidad. 

Así se puede acabar con problemas como las manchas, el acné, las arrugas, cicatrices e incluso la flacidez.

4. Corregir arrugas y líneas de expresión.

Una buena limpieza e hidratación de la piel favorecerá una piel más lisa y firme. Sin embargo, si se necesita atenuar las arrugas y las líneas de expresión en determinadas zonas se recomienda inyectar un complejo vitamínico a la piel del rostro. 

La piel estará visiblemente más joven e hidratada. Por otro lado, “si se desea conseguir el rejuvenecimiento de toda la piel del rostro, se puede hacer uso de un tratamiento con láser fraccionado, que mejora de forma progresiva la calidad y juventud de la piel”.

5. Prevención de la flacidez.

Corregir y prevenir la pérdida de firmeza en la piel es también importante a la hora de lucir una piel tersa, suave y luminosa. 

Para ello, los tratamientos más indicados son la radiofrecuencia médica, el ácido hialurónico, los hilos tensores, y la luz pulsada. Todos ellos están enfocados a mejorar el aspecto y vitalidad de la dermis.

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