Si estás pensando en adoptar un gato callejero, debes de considerar varios factores tanto de comportamiento del animal como de salud.
Primero debes de saber que un gato sin hogar suele ser arisco, desconfiado y poco sociable al inicio, si se lo compara con uno casero acostumbrado a la compañía de los humanos. El minino adoptado tendrá que cambiar su estilo de vida, así que dale tiempo.
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Antes de llevar al gato a casa, haz una visita al veterinario para que los especialistas evalúen su estado de salud. Te sugerimos empezar con una desparasitación interna y externa, luego descarta infecciones tanto respiratorias como digestivas y, para finalizar, dale un buen baño.
Alimentar al gato con comida casera puede ser difícil al principio pues está acostumbrado a comer lo que encontraba en la calle. Para que acepte la nueva dieta, puedes darle productos enlatados mezclados con croquetas.
Una buena noticia es que, por instinto, el gato no debería de tener problemas en usar desde el primer día la caja de arena para hacer sus necesidades y no así ensuciar la casa.
Para tomar en cuenta
-Precaución. Aunque tu gato no salga de casa, igual es importante colocarle una plaquita de identificación con un número de celular
-Hormonas. Los gatos no esterilizados son más propensos a escaparse de casa y perderse, o a exponerse a peligros como ataques de otros animales.
-Defensa. Si adoptas un gato callejero, aléjalo de otras mascotas hasta que se acostumbre a su nuevo ambiente. Podría sentirse amenazado y atacar.
-Identificación. Si encuentras un gato y sospechas que está perdido, gánate su confianza ofreciéndole algo rico de comer. Acércate poco a poco para que no se asuste.
Tomado de Viù con información de Lucero Yrigoyen M.Q.