Johaha y Nano
Johaha y Nano
Andrea Carrión

Hay toda una diversidad de motivos por los cuales las personas buscan llevar un perro a casa. En el caso de Johana Mas fue por querer darle calidad de vida a uno que no la tuviera. Y también fue por cumplir una promesa.

Ya había pasado un año desde que despidió para siempre a su Cocker Americano, Camilo, y Johana sentía que ya era el momento de darle la oportunidad a otro perro de tener un hogar.

Esta vez sería adoptado, así se lo había prometido a Camilo. Solo faltaba cerrar un detalle: encontrar a una persona que además de ayudar a Johana con la limpieza y cocina de su departamento, también cuidara a su nueva mascota mientras ella trabajaba.

Johaha y Nano (Foto: Andrea Carrión)
Johaha y Nano (Foto: Andrea Carrión)

Finalmente encontró a alguien y una vez cerrado el trato con esa persona, Johana se “zambulló” en Facebook y se puso a navegar páginas de individuos, grupos y asociaciones que ofrecieran perros en adopción.

“Hacía rato que notaba una tendencia general de adoptar mascotas. De hecho hoy en día cuando sales a la calle, se ven más personas caminando con sus perros mestizos, todos coquetones y bien cuidados. Al mismo tiempo, en redes me cruzaba con historias de perritos abandonados y en adopción, entonces pensé ‘Si voy a tener otro perro, que sea adoptado, ya no quiero comprarlo’. Y así fue como empezó la historia con Nano”, comenta Johana.

No pasó mucho tiempo hasta que encontró la foto de un perro que le llamó la atención.

Nano el mismo día en que Johaha lo recibió en casa. (Foto: Cortesía)
Nano el mismo día en que Johaha lo recibió en casa. (Foto: Cortesía)

“Me contacté con su rescatista y cuando estaba llenando la ficha de adopción por el perro que había visto en el post, esta chica me preguntó si estaría interesada en adoptar a otro perrito que también había rescatado pero que se le estaba haciendo difícil encontrarle adoptante por tener una de sus patitas más corta que el resto. Me mandó un video, me pareció lindo y acepté”, recuerda Johana.

Decidió llamarlo Nano.

A Nano le encantan sus juguetes y también el camote.
A Nano le encantan sus juguetes y también el camote.
Nano es el más hincha de todos cuando juega Perú.
Nano es el más hincha de todos cuando juega Perú.
Esa es la carita que salva a Nano cuando se mete en problemas.
Esa es la carita que salva a Nano cuando se mete en problemas.

El cachorro apenas tenía unos 6 meses de edad cuando Johana lo conoció. Al principio la rescatista le contó que lo habían rescatado luego de que su madre y su hermano murieran y que lo habían alimentado con biberón. Meses más tarde, a Johana le contaron otra historia: que la madre sí estaba viva, que su familia la había separado de su cachorro, que la maltrataban y que la tenían viviendo en la calle. Entonces la rescatista la sacó de ese ambiente y le consiguió una familia que la quisiera bien.

“Todo era perfecto, todo estaba listo para recibir a Nano, y de pronto me entero que la señora que había contratado para trabajar en mi depa me estaba robando. Eso fue un día antes de que me trajeran a Nano. Tristísima, llamo a mi mama y le digo ‘Ya no podré adoptar al perrito, me he quedado sin ayuda en la casa’ y ella me ofreció cuidarlo hasta que yo consiguiera a alguien más”, cuenta Johana.

johana y nano
johana y nano
johana y nano
johana y nano

En cuanto a su patita, Johana visitó algunos médicos veterinarios en busca de opiniones. Alguno le dijo que tenía la cadera dislocada y que necesitaría cirugía. Otro especialista le dijo que Nano aún estaba muy cachorro para operarlo, que lo dejara crecer para ver cómo respondía su cuerpo. Eso hizo. Ahora tiene 2 años de edad y pronto Johana deberá hacerle otro chequeo médico pues con el tiempo su problema puede ir degenerando y causarle dolor.

Generalmente los perros con discapacidad o problemas de salud suelen ser ignorados por quienes buscan una mascota. Johana es la excepción.

“Me pareció injusto que nadie lo quisiera por eso, él no tenía la culpa. Gracias a Dios yo tenía la posibilidad de darle la atención médica que pudiese necesitar”, explica Johana. “De hecho cuando recién estaba evaluando adoptar un perro, pensaba en uno adulto, de esos que nadie quiere, pero Nano se veía tan frágil y vulnerable que me nació adoptarlo a él. Ni la pensé”, agrega.

johana y nano
johana y nano

Recibir a una mascota en casa es un compromiso de por vida y para quienes están interesados en adoptar un perro, hoy en día hay muchas opciones. Una de ellas es , una asociación sin fines de lucro dedicada a la promoción de la adopción, el trabajo de concientización sobre la realidad de los perros en estado de abandono y la ejecución de proyectos que contribuyan a la construcción de un mundo mejor para todos los perros.

Años antes Johana ya había vivido de cerca la adopción luego de recoger y darle hogar a un perrito de la calle que nadie reclamó. Entonces vivían con otro perro, regalo de una tía. Y eso que, según Johana, ella le tenía miedo a los perros cuando era niña.

johana y nano
johana y nano
johana y nano
johana y nano

“Si uno ama los perros, ¿Qué mejor que darle ese amor y un hogar a un angelito que no tuvo la suerte de nacer en un hogar o tener un dueño que lo quiera?", pregunta Johana. "Esa fue la promesa que le hice a mi Camilo cuando partió de este mundo. Y a quién esté evaluando adoptar, le diría que lo haga. No tiene precio lo que transmite la mirada de un angelito al que le estás regalando la vida que merece”, agrega Johana.



Si quieres adoptar un perro, encuentra a tu compañero ideal en

Contenido sugerido

Contenido GEC