Los profesionales de la educación son los encargados de ayudar a potenciar las habilidades del niño en su primera infancia.
En la etapa inicial es primordial que el niño sea feliz. “También debemos recordar que durante estos años se evoluciona muy rápido, por lo que se necesita mucha estimulación”, afirma María Rosario Rivas Plata, educadora y directora de la Escuela Profesional de Educación de la Universidad Peruana Cayetano Heredia (UPCH).
LA REVOLUCIÓN TECNOLÓGICA
Uno de los cambios más evidentes en el proceso educativo es que, prácticamente, desde el principio de su vida, los niños están en contacto con la tecnología. “En su naturaleza, los niños del siglo XXI son similares a los del XX; no obstante, el contexto es totalmente distinto. Hoy tienen mucha información a su disposición gracias a las nuevas plataformas digitales y esta necesidad hace que desarrollen nuevas habilidades”, señala Manuel Rodríguez, director de la carrera de Educación y Gestión del Aprendizaje de la UPC.
En ese sentido, la alfabetización digital forma parte de su parte de su proceso formativo, ya que tienen que aprender a utilizar la tecnología y a manejar el volumen de información. Otras de las habilidades que se desarrollan en los centros de educación inicial más modernos son la socialización, el arte, la psicomotricidad fina y gruesa y se sientan las primeras bases para la alfabetización.
“No se debe perder de vista que el Perú es un país de distintas realidades. Un menor de tres años que vive en San Borja es diferente al de Puno o Cusco, ya que, por ejemplo, al crecer en el campo tienen otras capacidad motriz. El reto está en atender esa diversidad, que hasta puede ser cultural, y cerrar las brechas que hacen que no todos tengan las mismas oportunidades”, reflexiona el vocero de la UPC.