Preservar el patrimonio fotográfico de una familia, una empresa, una ciudad y por ende un país constituye una tarea titánica, en especial cuando el olvido y el hacinamiento hacen peligrar la integridad de las imágenes y sus soportes. Así lo entendieron en Fundación Televisa, una institución mexicana que tiene una amplia variedad de colecciones y archivos de arte prehispánico, pinturas, esculturas, fotografías y películas que ahora tienen una casa propia. Para comprender el invaluable trabajo que realizan los especialistas de Fundación Televisa conversamos con Duani Castelló Serrano, actual coordinadora de sus colecciones y archivos.
Fundación Televisa es una institución que fomenta la cultura y la educación. Sus inicios se remontan a 1974 cuando comenzaron la repatriación de piezas prehispánicas que eran subastadas en el extranjero. Aquella primera colección de arte prehispánico asciende a 530 piezas. A partir de allí no dejaron de crecer hasta tener como dice Duani Castelló: “cientos de miles de imágenes de los más diversos ámbitos”.
¿Cuál es el valor patrimonial de Fundación Televisa?
La historia comienza cuando el célebre fotógrafo mexicano Manuel Álvarez Bravo es invitado en 1980 para crear una colección sobre la historia de la fotografía que incluye imágenes de los fotógrafos más importantes; así como, obras que permiten entender la evolución del medio. Posteriormente, se integran a este extraordinario conjunto archivos históricos privados y de la propia empresa; así como, obras de autores contemporáneos, que permiten no solamente aumentar el patrimonio fotográfico, sino enriquecer las posibilidades de generar nuevos contenidos. La vitalidad de dicho patrimonio nos permite jugar un papel determinante en el campo de la investigación audiovisual de nuestro país y fortalecer la búsqueda de conocimiento a través de las imágenes, haciendo énfasis en la riqueza de la cultura audiovisual en México y América Latina.
Del centro cultural al sótano
En 1986 fue inaugurado el Centro Cultural de Arte Contemporáneo cuya colección tiene 1,868 obras. Durante 12 años se convirtió en referente del ámbito cultural, tanto en México como en el extranjero, por sus exposiciones y publicaciones. Sin embargo, en 1998 el centro cerró sus puertas.
Las colecciones fueron enviadas al corporativo Televisa Santa Fé, en Ciudad de México. Las bodegas del segundo y tercer piso del estacionamiento, ubicado en el sótano, fueron acondicionadas como bóvedas. Los autos que iban y venían de los estacionamientos constituían una fuente de emisión de gases tóxicos y además hacían difícil el traslado de las obras para su catalogación, conservación o préstamo según fuera el caso. Esquivar autos y goteras eran el pan de cada de día para el personal.
El nuevo milenio se inició no solo cambiando de nombre a Fundación Televisa, sino que se decidió concentrar sus esfuerzos en integrar a su acervo exclusivamente fotografías y películas: obras de autor, archivos históricos, documentales y familiares; así como, parte de la producción audiovisual producida por Televisa.
Nuevos aires
Desde mediados del 2012, el sueño de la casa propia comenzó a hacerse realidad para las colecciones y archivos de la Fundación. El primer paso consistió en sensibilizar a las autoridades respecto a la importancia de las colecciones y su trascendencia a nivel nacional e internacional.
La zona asignada para el nuevo edificio está al costado de un lago dentro del corporativo Televisa. Todo un reto para los constructores y conservadores que no solo debían asegurar que la humedad no penetre los muros; sino que debían tener muy en cuenta el peso del mobiliario y las obras de arte.
La distribución de las bóvedas y áreas de trabajo fue planteado por el personal a cargo, en ese entonces 14 especialistas. En la planta baja están las bóvedas más pesadas (división fílmica y arte contemporáneo), las áreas de montaje, la bóveda de tránsito, consulta para investigadores y un montacargas.
En el primer nivel se ubican la bóveda de fotografía, el área de digitalización, el laboratorio de conservación donde está el área de registro, catalogación y conservación. Además hay un cuarto de máquinas, área común y servicios. Incluso hay una terraza que serviría para construir una bóveda más en caso se necesite.
Se instalaron los sistemas de aire acondicionado de agua helada, que tiene bajo consumo de energía, y de supresión de incendios que utiliza el sistema Novec cuyo compuesto es un agente que no daña el medio ambiente.
La construcción comenzó en 2017 y terminó en marzo del año pasado. La mudanza se hizo entre abril y mayo de ese año con el equipo y ayuda de unos cargadores.
Custodios del cine mexicano
El Archivo División Fílmica tiene aproximadamente 1′000.000 de piezas entre fotografías, carteles, detrás de cámaras, publicidad, por mencionar algunas de ellas. Está compuesto por tres sub fondos: CLASA Films Mundiales, Televicine y archivo Guillermo Vásquez Villalobos. El primero de ellos es el archivo de la productora de cine más grande de México. Comenzó sus actividades con la película “Allá en el Rancho Grande” de Fernando de Fuentes (1935).
El archivo de Televicine tiene las fotos fijas, carteles, detrás de cámaras, fotos y documentos de la productora y distribuidora fílmica de Televisa, que fue fundada a raíz de la segunda producción cinematográfica del consorcio: “El Chanfle”, de Enrique Segoviano (1978).
El último sub fondo está compuesto por fotos fijas, carteles, publicidad, lobby cards, negativos y fotografías del cine mexicano de finales de los años 30 hasta principios de la década de los 90. Todas estas piezas fueron reunidas por Guillermo Vázquez Villalobos, editor de revistas y presidente de Periodistas Cinematográficos de México (Pecime).
Duani Castelló nos comenta: “En Fundación Televisa estamos comprometidos con la preservación del patrimonio cinematográfico de la empresa, es por ello que hemos establecido diversas sinergias con múltiples instituciones a nivel nacional e internacional”.
Para restaurar y digitalizar la película “Enamorada” (Emilio ‘El Indio’ Fernández, 1946) se trabajó en colaboración con el UCLA Film and Television Archive y The Film Foundation’s World Cinema Project, con el apoyo de la Fundación Televisa A.C. y la Filmoteca de la UNAM. Fue presentada en Cannes Classics 2018.
La película “Nazarín” (1958), del director español Luis Buñuel, fue restaurada y digitalizada en conjunto con el Laboratorio de Restauración Digital de Cineteca Nacional México. Este año fue presentada en Cannes Classics.