El castillo de Marienburg, en Alemania, es uno de los más espectaculares de Europa. Durante más de un siglo fue la residencia de oficial de la dinastía Hannover, pero sus altos costos de mantenimiento obligaron al príncipe Ernesto Augusto a venderlo por el precio simbólico de un dólar.
Según los medios alemanes, el aristócrata de 64 años no podía continuar costeando las obras de restauración y conservación que requiere el castillo. “Ha sido una decisión de una gran importancia para mi familia”, admitió el príncipe. “Ya no podía seguir haciéndome cargo de los gastos y hemos encontrado una buena solución que permitirá que el palacio y su inventario puedan conservase para el público”, añadió.
La empresa LIemak Inmobilien es la nueva propietaria del castillo de Marienburg. Se calcula que invertirán US$ 30 millones en su renovación, aunque los expertos precisan que se necesita el doble de ese monto para que el majestuoso inmueble no quede en ruinas.
Las obras para la preservación de la propiedad comenzarán en el 2020. Aún no se tiene definida la utilidad que se le dará al castillo, pero lo más probable es que se convierta en un museo y un hotel.
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El pasado mes de marzo, el príncipe Ernesto de Hannover estuvo en Lima con motivo del matrimonio de su hijo, Christian de Hannover, con la abogada y modelo peruana Alessandra de Osma. Aquella vez sufrió una descompensación y tuvo que ser internado de emergencia a una clínica de Miraflores.
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