Ese gesto mostrando los cuatro dedos de su mano quedó grabado en los hinchas del Real Madrid. Fue un golpe duro el que recibieron por parte de Robert Lewandowski. En el encuentro de ida por las semifinales de la Champions League pasada, el delantero polaco le anotó cuatro tantos en la ida al Real para casi sentenciar la serie 4-1. Aquella vez, en Alemania, el '9' de Klopp dio una clase en el área merengue de cómo definir.
Hoy, en la ida ante el Real Madrid por cuartos de final, Lewandowski no estará. El delantero deberá cumplir una fecha de suspensión por acumulación de tarjetas amarillas. Así como en Madrid se sienten más tranquilos por su ausencia, en Alemania no saben cómo suplirán su ausencia. El Dortmund no tiene otro delantero que pueda acercarse al nivel del polaco. Aun así Klopp, por su declaración, da entender que solo lo necesita un partido. “Si vuelve a marcar 4 goles todo estará bien”, dijo tras el sorteo.
Lo podría hacer de nuevo, por qué no. Lewandowski lleva tres años jugando a un muy buen nivel en el cuadro teutón. Tan buenas han sido sus temporadas que el Bayern ya cerró su fichaje para la próxima temporada y con un contrato que durará hasta el 2019. Ahora va a camino a igualar o superar sus números de la campaña anterior. Y en Múnich, con 25 años, espera consolidarse como uno de los mejores delanteros del mundo.
Robert lleva 15 goles en Bundesliga a falta de 10 fechas. Es el segundo máximo goleador de esta liga solo por detrás de Mario Mandzukic (17), y está a 9 tantos de igualar su mejor registro goleador en ese torneo: 24 goles. En Champions aún está lejos de superar los 10 tantos del 2013, actualmente suma 6, pero si le vuelve a propinar tremenda paliza al Madrid y su equipo logra clasificar a semifinales, no sorprendería que lo haga.
El Madrid, sin duda, tiene que aprovechar su ausencia. En el Santiago Bernabéu los de Ancelotti no se pueden dar el lujo de ir con una ventaja no menor al 2-0. Sabiendo que Robert estará del otro lado en el Signal Iduna Park, Cristiano, Bale y Benzema tienen que estar más inspirados que nunca.