Con un rival inspirado enfrente y un dedo de su mano que lo martirizaba, el suizo Roger Federer sufrió hoy más de lo esperado para avanzar a la tercera ronda del Abierto de tenis de Australia.Número dos del mundo, Roger Federer se impuso al italiano Simone Bolelli 3-6. 6-3, 6-2 y 6-2 y espera al ganador del choque de hoy entre el francés Jeremy Chardy y el italiano Andreas Seppi.
“Simone jugó muy bien en el primer set, yo no estaba jugando mal”, analizó el suizo, que busca su quinto título en Australia y hoy mostró mala cara durante buena parte del partido.
-
Por un lado estaba Bolelli, 48 del ranking mundial y dueño de un tenis de golpes sueltos y punzantes. El italiano mandó con su potente servicio y su dúctil revés hasta ganar el primer set de su vida ante Roger Federer. No había podido hacerlo en sus tres enfrentamientos anteriores con el suizo.Por el otro lado estaba el problema en el dedo, del que Federer fue atendido en el segundo set.“Sentía en el dedo como si me hubiera picado una avispa, algo que no había sentido nunca. Por suerte al final no fue tan grave”, explicó el suizo, que apretó los dientes y revirtió la situación ante un rival que a medida que avanzaba el partido en una tarde de intenso calor en Melbourne ya no pudo sostener el mismo nivel del inicio.“Estoy feliz de no tener que estar en la situación de haber perdido en la segunda ronda y no saber qué decir”, confesó Federer a su entrevistador en el Rod Laver Arena.