La polémica está asociada a Nick Kyrgios desde que apareció en el circuito de tenis. En el segundo día de competición, el australiano debutó en la edición 2022 de Wimbledon contra Paul Jubbs y cumplió: ganó por 3-2. Sin embargo, hubo otros matices a lo largo de la contienda desarrollada en el All England Club.
Las imágenes de la transmisión mostraron que el oceánico estuvo incómodo en varios pasajes la contienda. De hecho, el deportista tuvo discusiones con el juez de silla y con una jueza de línea. Encima, el público no le recibió de la mejor forma y se pasaron gran parte del choque insultándole para hacerle sentir en un ambiente hostil.
Después de concretar el pase a la próxima ronda (jugará contra el serbio Filip Krajinovic) del tercer Grand Slam de la temporada, Kyrgios dio detalles de lo ocurrido sobre el césped. “Ha sido una falta de respeto. Alguien me insultó, me dijo que era una mier**, desde el público. ¿Es eso normal? No. No entiendo porque ocurre todo el tiempo”, reveló.
“Amo Wimbledon. No tiene nada que ver con el torneo. Es simplemente una generación de gente que se cree que por estar en redes sociales tienen derecho a decir lo que quieran y lo siguen haciendo en la vida real. Porque hay una valla y físicamente no puedo hacer nada, ni decir nada, porque me metería en problemas”, agregó el número 40 del ATP.
Enseguida, Kyrgios admitió que, ante las reiterativas reacciones en su contra, giró hacia la grada y lanzó un escupitajo. “A una de las personas que me faltó al respeto. Sí, sí. No le hubiera hecho eso a alguien que me hubiera apoyado”, indicó en la conferencia de prensa posterior a su nueva aparición en el certamen.
Para cerrar, y sobre los inconvenientes con los jueces, Kyrgios reconoció haber llamado “soplón” a una de las autoridades de su partido. Sin más, Nick señaló que no se arrepiente por el uso de ese término. “No. ¿Por qué? Eso es lo que ella hizo. No hice nada y ella fue al árbitro y le dijo algo que no dije”, sentenció el atleta de 27 años.