El estudio sobre las brechas en los ingresos laborales entre hombres y mujeres según las ocupaciones que desempeñan ha permitido encontrar patrones que señalan las actividades que registran un menor salario para las mujeres.
De acuerdo al estudio sobre las mujeres en el mundo del trabajo de la Organización Internacional de Trabajo (OIT), las categorías ocupacionales que registran una brecha salarial más alta, entre 25% y 30%, son los artesanos y peones, operadores de máquinas, y científicos.
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BRECHAS MÁS ALTAS DEL MUNDO LABORALLa brecha más alta entre todas las ocupaciones es la que se refiere al manejo de maquinaria pesada.
Es así que en los trabajadores dependientes de esta rama, se reporta las diferencias salariales entre 25% y 27%, aproximadamente.
De acuerdo a la OIT, la causa se debería a que en esta actividad, las maquinarias que operan los trabajadores dependientes son más sofisticadas e intensivas en capital, en comparación a las usadas por los autoempleados. Por ello, las diferencias en los ingresos para trabajadores independientes serían más similares entre hombres y mujeres.
“El mercado no va a resolver solo las brechas salariales, el Estado debe intervenir con políticas para poder crear un balance entre trabajo y familia y así mejorar la participación de las mujeres en todas las ocupaciones”, adiverte Enzo Defilippi, profesor de Pacífico Business School.
Asimismo, para Mirko Urljevic, profesor de economía del PAD, los salarios entre trabajadores deben depender de los servicios que brinden en sus negocios.
“Para el caso Perú, de acuerdo a mi experiencia, en los negocios propios los salarios dependen del tipo de carreras que se desempeñen, si son más demandadas por las habilidades que implican, serán mejores remuneradas, y esto se asocia al tipo de servicios dado por la empresa desde luego”, sostiene.
La segunda ocupación con una de las brecha más altas es la de artesanos y peones, tanto para los trabajadores empleados como los trabajadores independientes. En el caso de los últimos, la brecha salarial se dispara a cifras mayores del 40%, mientras que en el caso de trabajadores dependientes, la diferencia salarial bordea el 25%.
Los profesionales y científicos registran el tercer lugar entre las ocupaciones con mayor brecha salarial, unos puntos porcentuales por debajo de los artesanos y peones. No obstante, las brechas se reducen si se comparan los salarios entre trabajadores independientes: la brecha apenas supera el 15%, cerca de 10% menos que los trabajadores dependientes.
“Las empresas pierden mucho talento por no dar más facilidades a las mujeres durante su juventud. Si bien puede ser un costo desembolsable en el corto plazo, creo que las empresas ganarían más por la calidad del recurso humano y la productividad que se genera a partir de la diversidad”, afirma Defilippi.
Asimismo, para Urljevic, los trabajadores deben ser seleccionados por las habilidades que se requieran en cada puesto.
“Yo no creo en las regulaciones mandatorias que piden cuotas de mujeres en las empresas. Para dar igual de oportunidades, se debe tener en cuenta las capacidad del postulante, las habilidades que se buscan explotar en ese puesto de trabajo, así se tomarán mejores decisiones, sin incluir sesgos”, dijo.
BRECHA PEQUEÑADos categorías ocupacionales analizadas por el estudio presentan las brechas salariales más pequeñas.
Las Fuerzas Armadas, donde no hay autoempleados y que por tradición un mayor número de hombre entre sus diversos cargos, tiene diferencias mínimas (entre 5% y 7%) en los salarios entre hombres y mujeres. De acuerdo a la OIT, esto responde a la estructura jerárquica de cargos que existen en el mundo castrense.
“Aunque no sorprende, por las características del trabajo no calificado, tales como manicurista, modelo, albañil o conductor, esta categoría ocupaciones se encuentran también entre las que presentan salarios más similares, un poco por debajo de la brecha en las ocupaciones militares”, concluye la investigación de la entidad internacional.