El presidente ejecutivo de Audi, Rupert Stadler, fue detenido el lunes, convirtiéndose en el directivo de mayor rango en ser arrestado por el escándalo de emisiones de gases del fabricante alemán de vehículos.
La fiscalía de Múnich dijo que Stadler fue detenido porque los investigadores veían riesgo de destrucción de pruebas, sumiendo de nuevo a Volkswagen en una crisis de liderazgo.
La noticia de la detención se produce mientras el nuevo presidente ejecutivo del grupo, Herbert Diess, está tratando de introducir una renovada estructura de liderazgo, que incluye a Stadler, y acelera el cambio del grupo hacia los vehículos eléctricos tras el escándalo de las emisiones.
“Dentro de la investigación en el asunto del diésel y los motores Audi, la oficina del fiscal de Múnich ejecutó una orden de arresto contra el sr. profesor Rupert Stadler el 18 de junio de 2018”, dijo la oficina del fiscal de Múnich en un comunicado.Tras comparecer ante el juez, el magistrado ha ordenado que continúe bajo custodia, dijeron los fiscales, agregando que querían evitar que obstruyera la investigación o destruyera pruebas.Audi y VW confirmaron la detención y reiteraron que aún existía la presunción de inocencia para Stadler. El propio Stadler no estuvo disponible inmediatamente para hacer comentarios.Un portavoz de Porsche SE, la empresa que controla VW y Audi, dijo que la detención de Stadler sería abordada en una reunión del consejo de supervisión el lunes.
VW admitió en septiembre de 2015 que usaba un software ilegal para alterar las pruebas de emisiones de motores diésel en EEUU, desatando la mayor crisis en la historia de la compañía y desencadenando investigaciones de los reguladores en toda la industria.