En su mensaje a la nación por Fiestas Patrias, el presidente Martín Vizcarra tuvo un discurso lúcido y concreto en temas políticos, pero en el ámbito económico no mostró tener medidas concretas para sostener el crecimiento cuando los vientos del exterior dejen de soplar en favor del Perú.
La economía se acelera, pero no es un fenómeno solo para el Perú. El mandatario indicó que encontró “una economía paralizada”, pero su gobierno implementó “una serie de acciones para reencauzar el país”. A su juicio, las últimas cifras revelan que los resultados de tales acciones “comienzan a notarse” y mostró su convicción de que la producción nacional crecería 4% este año.
En primer lugar, cuando Vizcarra asumió el sillón de Pizarro a finalesde marzo, la economía ya estaba en senda de aceleración. En el primertrimestre creció 3,2%, la tasa más alta desde el tercer trimestre del 2016 (4,7%). Las obras para los Juegos Panamericanos representan un fuerte impulso de la inversión pública.
Si bien la actividad se habría acelerado por encima de 5% en el segundo trimestre, la recuperación es cíclica, no exclusiva para el país. Esto debido a que la dinámica de los precios de los commodities impulsa a todos los países emergentes.
Por ejemplo, en la primera mitad del año el precio del cobre creció 20% y Chile –con mayor dependencia del cobre que el Perú– creció 4,2% en el primer trimestre y también se habría expandido más de 5% en el segundo.
Al respecto, el ex ministro de Economía Alonso Segura recuerda quelos buenos vientos a favor comenzaron en la segunda parte del 2016 y destaca que el crecimiento de 2,5% en el 2017 fue “anómalo”, causado por errores del Ejecutivo.
La inversión pública crece fuerte, pero por los Panamericanos. Aparte del entorno internacional, en el Perú se está acelerando la demanda interna, apuntalada por el crecimiento de la inversión privada minera y la inversión pública, que en la primera mitad del año creció 18,6%.
Según cifras del Banco Central de Reserva (BCR), la formación de capital físico en el país para todo nivel de gobierno creció 20,8% en el primer semestre.
Sin embargo, si se descuenta el efecto de las obras de construcciónde los Juegos Panamericanos, esa tasa cae hasta solo 9,5%.El presidente Vizcarra subrayó el rol de la política fiscal en la reactivación, pero no el de la política monetaria expansiva que el BCR viene aplicando desde el año pasado; que ha ayudado a que el crédito se acelere a ritmos de casi dos dígitos, dinamizando el consumo privado.
También anunció que el próximo año se dará más participación en el presupuesto a los gobiernos subnacionales, que tendrán nuevas autoridades. Es importante recordar que en el 2011 y el 2015 (años de cambios de gobiernos subnacionales) la inversión pública de estas autoridades se desplomó 15% y 22%, respectivamente.
El plan de competitividad es un diagnóstico obvio a 10.000 pies de altura. En cuanto a anuncios de reformas estructurales,no se dio nada concreto.
Pero el mandatario sí resaltó que el viernes el MEF publicó un documento de discusión de un plan nacional de competitividad, el cual –como hemos analizado en El Comercio– hace un diagnóstico obvio y no propone soluciones concretas.
En la óptica de Segura, ya ha habido otros planes de ese tipo en añosanteriores, pero el actual “dice las cosas correctas a 10.000 pies de altura”. El reto –considera– es aterrizarlo a cosas precisas.
Hugo Ñopo, investigador principal de Grade, resaltó lo positivo de lavisión presidencial en materia educativa. “La meritocracia en la carrera docente y la reforma universitaria que continúa son temas enormes”, resalta.
Ambos economistas observaron la importancia de la esperada reforma tributaria. Aunque el presidente repasó los planes que se tiene como parte de las facultades legislativas, descartó que vaya a haber una subida de impuestos o propiciar que más personas paguen tributos.
Para Ñopo, eso es crucial porque, aunque sea impopular con la ciudadanía, se requiere más dinero para las reformas. En ese sentido, Segura agrega que es clave priorizar la consolidación fiscal.