AFP.- Perú y Chile serían los únicos países que reportarían un repunte en su crecimiento este año en América del Sur gracias a la aplicación de políticas expansivas y a la eliminación de frenos a corto plazo en su actividad, informó un reciente informe del Fondo Monetario Internacional (FMI). Follow @PortafolioECpe!function(d,s,id){var js,fjs=d.getElementsByTagName(s)[0],p=/^http:/.test(d.location)?'http':'https';if(!d.getElementById(id)){js=d.createElement(s);js.id=id;js.src=p+'://platform.twitter.com/widgets.js';fjs.parentNode.insertBefore(js,fjs);}}(document, 'script', 'twitter-wjs');
Así, el informe “Perpectivas Económicas: Las Américas”, lanzado en Santiago de Chile, prevé que el Perú pase a crecer de 2,4% a 3,8% este año, mientras que Chile salte de un PBI de 1,8% en 2014 -el más bajo en cinco años- a una ligera recuperación de casi un punto porcentual, para llegar en 2015 al 2,7%.
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“Aun así, existen incertidumbres importantes que ensombrecen el horizonte en ambos países, relacionadas con las condiciones externas, el impacto de las reformas en curso en Chile, y la lentitud de la ejecución de las inversiones a nivel subnacional en Perú”, advirtió el FMI.
ESCENARIO REGIONAL
En tanto, un peor desempeño de las economías de Brasil, Ecuador y Venezuela, golpeadas por la caída en los precios de las materias primas, arrastrarán a América Latina y la llevarán a alcanzar en 2015 una expansión de apenas un 0,9%, afirmó el FMI.
“Se prevé que el crecimiento regional se reduzca por quinto año consecutivo, alcanzando un mínimo ligeramente por debajo del 1 por ciento, para luego comenzar a recuperarse en forma moderada en 2016”, dijo el FMI.
La gran corrección a la baja del crecimiento regional de 2015, de casi 1,4 puntos porcentuales respecto a reportes del FMI de octubre, “responde al deterioro de las proyecciones de América del Sur, en especial en Brasil, Ecuador y Venezuela, mientras que las perspectivas de América Central y el Caribe han registrado una leve mejora”, explicó el organismo.
El FMI proyecta para este año una contracción de la economía de Venezuela de un 7% y una caída del 1% de Brasil, la mayor economía regional, que está atravesando la peor recesión en más de dos décadas.
En Brasil “la inversión privada sigue representando un freno importante a la actividad, ya que los perdurables problemas de competitividad se ven agravados por la debilidad de los términos de intercambio y la alta incertidumbre relacionada, entre otros aspectos, con los efectos de la investigación de Petrobras y el impacto de una sequía prolongada sobre el suministro de energía eléctrica. La confianza de los consumidores también se deterioró de manera marcada, en un contexto de inflación elevada, oferta de crédito más restrictiva y debilitamiento incipiente del mercado laboral”, explicó el FMI.
La economía de Argentina, en tanto, caería un 0,3% en 2015, mientras que Ecuador se desaceleraría desde una expansión de 3,6% el año previo a un 1,9% en 2015.
Ante el desalentador escenario, el FMI anima a los países a fijar su atención en los tipos de cambio que podrían “jugar un rol crucial en el ajuste a un contexto externo más difícil” con una depreciación de las monedas locales que podrían alentar la producción nacional y reducir el déficit externo.
Mientras que también insta a los gobiernos a enfocarse en “mantener las expectativas de inflación alineadas con las metas oficiales” y ajustar sus déficit fiscales “sin poner en riesgo la sostenibilidad de la deuda”.
IMPACTO DE CRECIMIENTO ECONÓMICO DE EE.UU.
La economía de Estados Unidos continúa en alza y el FMI prevé una expansión de 3,1% para este año, desde un 2,4% en 2014, basada en “el robusto gasto de consumo”, donde se incluye “un mayor afianzamiento del mercado laboral, precios de la energía marcadamente inferiores y una inflación subyacente controlada que eleva los ingresos reales”, señala el informe.
Sin embargo, algunas sombras mantienen en vilo al gigante mundial ya que un dólar más firme y la posible subida de las tasas a largo plazo podrían complicar el avance que según el FMI no se mantendrá por mucho tiempo, ya que el crecimiento potencial estimado para el país es de 2%.
En un contexto mundial en el que la recuperación desigual de la economía es la regla, el “crecimiento sólido en Estados Unidos contrasta con las perspectivas aún moderadas para la zona del euro y Japón” que sumado a la desaceleración de China beneficia en especial a América Central y México.
Beneficiada por los vínculos que la unen a Estados Unidos, de donde recibe un importante número de remesas y hacia donde envía un alto porcentaje de sus ventas al exterior, la economía de México -la segunda economía más grande la región- crecería un 3,0%, desde 2,1% del año anterior.
En tanto, “las perspectivas de crecimiento de América Central mejoraron, gracias al abaratamiento del petróleo y a la sólida recuperación en Estados Unidos”.