Hugo Perea, economista jefe del BBVA Research Perú, señaló a El Comercio sus proyecciones macroeconómicas para el siguiente año y las acciones que deberá tomar el gobierno para continuar en el camino del crecimiento.Follow @EconomiaECpe !function(d,s,id){var js,fjs=d.getElementsByTagName(s)[0],p=/^http:/.test(d.location)?'http':'https';if(!d.getElementById(id)){js=d.createElement(s);js.id=id;js.src=p+'://platform.twitter.com/widgets.js';fjs.parentNode.insertBefore(js,fjs);}}(document, 'script', 'twitter-wjs');
–¿La economía crecerá en el 2017 al ritmo que proyecta el gobierno?Todas las proyecciones macroeconómicas asumen escenarios y trayectorias para variables exógenas, muchas de las cuales no se pueden controlar. Por ejemplo, nadie sabe con exactitud cuáles serán las medidas concretas que implementará la nueva administración en EE.UU. y el impacto que tendrán sobre Perú.
Otro ejemplo, no se puede prever con certeza qué va a pasar con la confianza empresarial y, por lo tanto, con la inversión privada. Dada esta incertidumbre, se tienen que hacer supuestos sobre la evolución futura de estas variables. Las diferencias en las proyecciones de crecimiento del PBI muchas veces se explican porque se han hecho supuestos distintos sobre estas variables exógenas.
Dicho esto, las proyecciones del MEF y del BCR son algo mayores a las que tenemos nosotros, posiblemente porque nosotros hemos sido algo más conservadores en algunos supuestos. En lo que sí coincidimos es que la economía peruana será una de las más dinámicas de la región en 2017.
–¿Cuál es el factor y/o sector que más debería impulsar o cuidar el gobierno? Con seguridad la ejecución de las grandes obras de infraestructura. En la medida que el efecto dinamizador de la minería metálica se va diluyendo a lo largo del próximo año (Las Bambas y Ampliación Cerro Verde estarán ya a su máxima capacidad operativa, por lo que el impulso será mucho menor al que hemos visto en 2016), las obras de infraestructura tomarán la posta como motor del crecimiento.
–¿Qué factores exógenos, sobre todo entre los términos de intercambio, podrían impactar estas cifras?Entre los factores exógenos que pueden afectar las proyecciones de crecimiento tenemos:
► El escenario internacional, sobre el que hay una alta incertidumbre: (i) los impactos de las políticas que implementará el nuevo gobierno en EE.UU., (ii) elecciones en Europa y la posibilidad de que las opciones anti unión cobren una mayor presencia, (iii) las fragilidades financieras en China, (iv) el agotamiento de las políticas monetarias ultra expansivas, (v) las implicancias de un entorno global de bajas tasas de interés, (v) riesgos geopolíticos en diversas partes del mundo (medio oriente, el mar de China, el este de Europa, etc.),
► Por el lado local: (i) la evolución de la confianza empresarial empresarial, (ii) el desarrollo de las obras de infraestructura y (iii) el escenario político.
–¿El destrabe de obras de infraestructura reactivará la economía como espera el gobierno?Esperemos que sí. En lo positivo es que vemos a este gobierno muy comprometido con querer dar el impulso necesario a las obras de infraestructura. Ojalá obtengan el impacto que desean. Además del destrabe de los proyectos de infraestructura, otro elemento al que también debe prestar atención el gobierno debido al impacto positivo que podría tener sobre la inversión es la reducción de barreras burocráticas y de sobre regulación que han deteriorado el clima para hacer negocios en Perú en los últimos años.
–¿Cuál sería su mensaje de despedida económico para el 2016?A pesar de que 2016 fue un año con episodios de volatilidad (en el primer trimestre China, luego el ‘brexit’, problemas en Brasil, elecciones en Perú, elecciones en EE.UU., subida de la tasa de la FED, etc.) la economía peruana habría registrado una expansión cercana a 4%, con lo que habría colocado entre las economías de la región de mayor crecimiento.
Si bien es cierto que buena parte de este crecimiento se explica por el empuje un sector, minería, también es resultado de nuestras fortalezas macroeconómicas. Ahora bien, hay que dejar el 2016 atrás y mirar hacia adelante en donde el desafío no sólo es mantenernos como la economía más dinámica de Latam, sino uno más grande que consiste en acelerar el crecimiento para seguir reduciendo pobreza, crear suficiente empleo de calidad y generar una mayor inclusión social.