Luego de tres meses, hoy finalmente terminaron con la habilitación del puente temporal sobre el río Rímac a altura del kilómetro 8.5 de la Carretera Central, en Huachipa, Ate.
Sin embargo, los vecinos enfrentan un problema aún peor pues la falta de iluminación y de policías ha propiciado el aumento de inseguridad en la zona.
Con el nuevo puente peatonal, colocado sobre el viejo puente Bailey, los vecinos de Huachipa ya no tendrán que cruzar riesgosamente o tomar otra ruta durante 20 minutos hasta la avenida Ramiro Prialé.
Pero ahora los vecinos piden a la municipalidad de Ate y a la Policía Nacional mayor vigilancia pues en la ribera del río se ha instalado una carpa donde personas de mal vivir beben alcohol y se drogan. También se ha reportado furtivos encuentros sexuales al paso.
“Hay gente que viene por acá en su carro a usar esto como hotel. Otros creen que esto es una letrina”, refirió un trabajador del Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa) a la agencia Andina.
Además, aseguraron que los focos de los cuatro faroles ubicados a cada lado del puente no prenden de noche.
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Serenos de @Munimolina atendieron parto en una vivienda http://t.co/lYESLkXOgU pic.twitter.com/1JTKtkAJ4m— Sociedad El Comercio (@sociedad_ECpe) julio 16, 2015
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