Tras la temporada de premios más corta en décadas, la 92da entrega anual de los Premios de la Academia será el domingo por la noche en el Teatro Dolby en Los Ángeles. La alfombra roja se está desenrollando dos o tres semanas antes de lo usual en un intento por refrescar la ceremonia y potencialmente impulsar sus ratings.
El calendario truncado ha puesto a dieta una temporada de Oscar normalmente inflada (la gala del domingo también carecerá de un anfitrión por segundo año consecutivo) y apresuró a los miembros de la academia a terminar de ver las películas nominadas a tiempo — una tarea desafiante en un año que incluye épicas de tres horas como “The Irishman” (“El irlandés”) y “Once Upon a Time ... in Hollywood” (“Había una vez en Hollywood”).
Tras ganar casi todos los honores que anteceden al Oscar, “1917” de Sam Mendes, sobre un par de soldados británicos enviados a entregar un mensaje urgente en territorio enemigo durante la Primera Guerra Mundial, se perfila como la favorita a mejor película. Gracias a su brillo técnico, el filme, que simula haber sido rodado en un solo plano continuo, probablemente también se lleve el mayor número de galardones, aun cuando no tiene a ningún actor nominado.
Mientras Joaquin Phoenix, Renée Zellweger, Brad Pitt y Laura Dern parecen tener aseguradas sus victorias en las categorías de actuación, aún existe la posibilidad de una sorpresa histórica. El thriller surcoreano de Bong Joon Ho “Parasite” (“Parásitos”) ha ido tomando impulso y algunos creen que podría convertirse en la primera cinta en lengua no inglesa que gane el Oscar a la mejor película.
Tal victoria representaría un momento crucial para los Premios de la Academia, que por años han relegado las películas internacionales a su propia categoría. Pero en un esfuerzo por diversificar su membresía ampliamente blanca y masculina, la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas ha incorporado más miembros extranjeros en años recientes. Y prácticamente nadie tiene algo negativo que decir de la muy elogiada sátira de clases “Parasite”, ganadora de la Palma de Oro el año pasado en el Festival de Cine de Cannes y la primera película en lengua extranjera en alzarse con el máximo honor en los Premios SAG del sindicato de actores.
Entre los presentadores de los Oscar estarán Tom Hanks, Maya Rudolph, Spike Lee, Julia Louis-Dreyfus, Chris Rock, Timothee Chalamet, Will Ferrell, Diane Keaton y Kelly Marie Tran.
La ceremonia será apenas días después de la muerte de Kirk Douglas, uno de los últimos sobrevivientes de la era dorada de Hollywood. También se anticipa que Kobe Bryant, ganador de un Oscar en 2018 por el cortometraje “Dear Basketball", sea incluido en el segmento In Memorium durante la gala.
La cadena ABC y la academia esperan que la popularidad de algunas cintas nominadas este año — incluida “Joker” (“Guasón”), que recaudó 1.000 millones de dólares en taquilla y compite por 11 premios — ayude con los índices de audiencia. El año pasado el espectáculo fue visto por 29,6 millones de televidentes, un incremento de 12%.
Este año los Oscar llegan en medio de grandes ajustes en Hollywood. En una lucha por seguirle el ritmo a Netflix y Amazon, la mayoría de los grandes estudios se están preparando para lanzar, o ya han lanzado, sus propios servicios de streaming, al igual que debutantes como Apple. Netflix llega a los Oscar con 24 nominaciones gracias a “The Irishman” (“El irlandés”), “Marriage Story” (“Historia de un matrimonio”), “The Two Popes” (“Los dos papas”) y la probable ganadora a mejor documental, “American Factory”.
Pero pese a invertir fuertemente en la temporada de premios, lo más seguro es que Netflix se vaya a casa con pocos premios. El servicio de streaming todavía está buscando su Oscar a la mejor película luego que “Roma” de Alfonso Cuarón estuvo a punto de ganarlo el año pasado.
En vez, este año las favoritas son películas que en su mayoría tuvieron grandes estrenos cinematográficos. También son predominantemente protagonizadas y dirigidas por hombres.
Tras un año en el que las mujeres tuvieron importantes logros detrás de las cámaras, ninguna fue nominada a mejor dirección. Los apartados de actuación también son los menos diversos desde que la campaña #OscarsSoWhite (#OscarTanBlanco) llevó a la academia a reestructurar su membresía. Cynthia Erivo (“Harriet”) es la única actriz de color nominada. Esos resultados, que han sido mencionados en múltiples discursos a lo largo de la temporada de premios, contrastan con estudios que indican que las películas más populares tuvieron más actores de minorías que nunca.
La venta de boletos para el cine bajó 4% el año pasado pese al récord registrado por Walt Disney Co. de 13.000 millones de dólares en la taquilla mundial. Disney, que adquirió 20th Century Fox en 2019, se apuntó un impresionante 38% de la boletería doméstica. Sin embargo, probablemente tenga un papel pequeño en los Premios de la Academia. El estudio podría ganar mejor cinta animada con “Toy Story 4” y posiblemente mejor edición por la película de Fox “Ford v Ferrari” (“Contra lo imposible”).