'Amok' es el término que los malayos utilizan para describir el síndrome por el que una persona ataca, con ira ciega y sin motivo alguno, a todo aquel que se cruce en su camino, para luego caer en una profunda amnesia. Giacomo Roncagliolo (Lima, 1989) ha traducido este vocablo en una novela de ciencia ficción que es una bocanada de aire fresco en nuestro panorama literario.
“Ámok” no es un libro perfecto, pero contiene varias sorpresas para la platea. Es la historia de X, un joven perturbado por un turbio pasado familiar que deja atrás su vida –ciudad, trabajo, novia– y pasa a militar en las filas de una secta criminal, la de los ámoks. Cada célula de ámoks está dirigida por un líder que no solo guía a sus subalternos, sino que les provee de bienes y trabajos para subsistir en el caos. Cuando Óscar, el cabecilla del grupo donde ha sido asignado X, desaparece sin dejar pistas, la novela pasa de la tensa expectativa a un viaje frenético a lo largo de carreteras, asaltos sangrientos y cadáveres abandonados entre la nieve, donde colisiona contra los espejismos que ella misma ha erigido en un final abierto y desconcertante.
Es obvia la influencia de Philip K. Dick en esos angustiantes descentramientos entre lo onírico y lo tangible, pero los referentes de Roncagliolo son más cinematográficos que literarios, tanto por sus guiños a “Mad Max” o a las películas del francés Alexandre Aja, como por el constante uso de diálogos, en los que muestra un meritorio sentido de la oralidad, especialmente en las intervenciones del delirante Perales y de la perspicaz Nía. Debo destacar también la prosa cuidada con momentos de sobrio lirismo en los que se ilustran con lucidez y minuciosidad las escenas más determinantes del libro.
Hay otros episodios menos logrados, como aquellos en los que Roncagliolo se imbuye en los antecedentes familiares de X, donde muchas cosas se sugieren, pero pocas se concretan. La impresión que tiene uno al cerrar las páginas de “Ámok” es que estamos frente a un narrador que dosifica bien sus recursos, no se distrae con abalorios y nos persuade para ingresar en ese mundo convulso y engañoso a nuestra cuenta y riesgo. Nada mal para un debutante.
AL DETALLE:Título: “Amok”Puntuación: 3 estrellas y mediaAutor: Giacomo Roncagliolo. Editorial: Pesopluma. Año: 2018. Páginas: 223. Relación con el autor: ninguna.