En esta época donde es más común alzar la voz por la igualdad, los diferentes campos del arte le abren paso a historias y personajes de la comunidad LGBTQ. México, a pesar de su conocido conservadurismo, lo hizo en el 2017 con Aristemo. Por primera vez en la historia de ese país, una pareja homosexual de la ficción tenía un rol tan importante en una telenovela de horario estelar.
El éxito que acompañó a la telenovela “Mi marido tiene más familia” hizo que, dos años después, los actores y cantantes Emilio Osorio y Joaquín Bondoni, quienes interpretaron a los personajes Aristóteles y Cuauhtémoc respectivamente; tuvieran su propio spin-off: “Juntos, el corazón nunca se equivoca”. Conversamos con ellos a propósito de su presentación en Perú en febrero del 2020, en la que Bondoni acompaña a Osorio cantando una canción en su “Perfect tour".
Nota: Emilio Osorio y Joaquín Bondoni fueron entrevistados por separado el mismo día. Por motivos de claridad, sus respuestas han sido colocadas juntas.
¿Tuvieron alguna dificultad al interpretar a Aristemo o ya habían interpretado a personajes homosexuales antes?
Emilio: Nunca había tenido la oportunidad de interpretar a un personaje homosexual, pero lo que tratábamos siempre de explotar y de dar a conocer en la historia fue eso; que el punto de que fuera homosexual no marcaba la diferencia en dos personas que se amaban. Los escritores tuvieron una buena visión de lo que querían para los personajes; por eso no fue difícil manejar a Aristóteles, mas bien fue un reto. El reto de dar a conocer a la gente todos estos valores del amor, de la paz, de la libertad, del amarse y respetarse.
Joaquín: Yo había hecho un personaje homosexual antes en “La rosa de Guadalupe”, pero nada es fácil. Requiere de mucha disciplina, de mucha concentración, orden y limpieza. Manteniendo eso firme y claro, todo sale bien. Además, es importante verle el lado divertido. El arte es diversión, aunque tenga su lado de disciplina y exigencia. Yo soy muy feliz.
Sin el apoyo mutuo entre ustedes, Aristemo no hubiera sido posible. ¿Cómo fue conectar como compañeros delante y detrás de cámaras?
Emilio: Con Joaquín, fue el saber respetarnos y tener la confianza correcta para recrear los personajes. Los que nos caracteriza como actores es el respeto mutuo que tenemos dentro del set y del escenario; el saber los tiempos de cada uno y también respetar los personajes y la historia.
Joaquín: Emilio y yo ya nos habíamos conocido antes del proyecto y empezamos con las mesas de trabajo, con ejercicios de conexión y química. Poco a poco, esa química se trasladó dentro del set y en la actuación. Y detrás de cámaras, lo principal es la comunicación. Siempre nos poníamos de acuerdo en todo para hacer las escenas y nos proponíamos cosas. Respeto mucho el trabajo de Emilio.
¿Qué es lo que más valoran del otro?
Emilio: Conocí a Joaquín dos semanas antes de empezar “Mi marido tiene más familia” y conectamos muy bien. Fue bueno tener un compañero que supiera valorar el trabajo y la dedicación para el público. Eso es lo fundamental.
Joaquín: Emilio es una persona muy profesional, es un chavo muy centrado. Es fuerte y sabe lo que quiere. La seguridad que tiene es impresionante y alrededor de todo lo que se vivió con la historia, lo extraño mucho. A él y a nuestros compañeros los extraño, porque se volvió una familia.
“Juntos, el corazón nunca se equivoca” surgió por la buena aceptación de la pareja en “Mi marido tiene más familia”. ¿Cómo vivieron el ascenso de popularidad de ambos personajes?
Emilio: No es que Joaquín y yo estuviéramos enfocados en la popularidad, pero tampoco era un problema. Nunca seguí trabajando con Aristemo por la fama, sino por el público. Es importante para el actor saber a dónde llegar con los personajes. He estado en proyectos a los que les ha ido muy bien y otros a los que no, pero en todos tuve esa mentalidad de que, pase lo que pase y te vaya como te vaya, tienes que tenerle el mismo respeto a la carrera y a tus personajes.
Joaquín: Yo lo viví con disciplina y amor. Yo quiero agradecer a los fans, por su tiempo y todo lo que hacen por nosotros. Lo más importante es su salud. Sé que es el mundo del entretenimiento, pero lo más importante es la salud.
¿Cómo llevan la responsabilidad de representar a la comunidad LGBTQ?
Emilio: No puedo definir si tengo un liderazgo o no. Eso lo define el público, pero aún así, no creo que tenga alguna bandera, porque apoyo la comunidad LGBTQ y he convivido con ella desde que he nacido; pero no podría llevar un liderazgo. Es curioso porque se habló que tenemos mucho apoyo de la comunidad, pero en el teatro y la gente que nos seguía no eran parte de ella y nos seguían solo por la historia bonita del amor pacífico, blanco y lindo.
Joaquín: Yo lo llevo con mucho agradecimiento. Me siento agradecido y con mucha paz. Al ver a cada vez más personas apoyándonos en redes, me pone muy feliz.
Sin embargo, la sociedad mexicana es aún conservadora. ¿Les tocó pasar algún mal momento en la calle o en las redes sociales?
Emilio: El cambio, el ser diferente y pensar de una manera diferente, tiene sus pros y sus contras. El pro de pensar diferente es que la gente que quiere pensar así, te va a seguir y te hará una imagen de liderazgo; el contra es que mucha gente también te va a contradecir y decirte que estás equivocado. El punto es seguir lo que quieres y lo que te hace sentir bien. Y a mí me hacía sentir bien apoyar la causa de la comunidad LGTBQ.
Joaquín: Este año ha sido de muchos aprendizajes. Así sean comentarios malos, siempre los voy a agradecer, porque aprendes. La vida te da esas enseñanzas por algo. A esta vida venimos a aprender, a descubrir, a amar y a ser amados.
¿Les afectan las críticas?
Emilio: Si me afectaran las críticas, no hubiera podido seguir con el personaje cuando la gente me ‘shippeaba’ con Joaquín. Hay mucha gente que cree o creía que yo tenía alguna orientación homosexual. La primera entrevista que di con Aristemo fue totalmente sincera. Fue decirles “hay mucha gente de la comunidad que piensa que yo también soy parte de ellos, pero lamentablemente no”. Quisiera, pero no (risas). No soy parte, pero me siento cobijado.
Joaquín: A veces hay críticas constructivas y depende de la gente y el sentido en el que te las digan. Tú sabes cuándo la gente te lo dice de corazón y cuándo te lo dice por... ya sabes. Yo sé qué críticas tomar.
En la telenovela se habla del matrimonio igualitario, la adopción homoparental, los crímenes de odio y la discriminación. ¿Sienten que México está avanzando en estas demandas o todavía las ignora?
Emilio: México está avanzando, está teniendo mucha más aceptación a la comunidad; no solo por Aristemo. Varios, en estos últimos años, llevamos la batuta de apoyar la comunidad LGBTQ y es importantísimo. Apoyarla es bonito, sobre todo a través de marchas pacíficas que se relacionen con el amor. La última que tuvimos en México y en la que participamos Joaquín y yo fue bonita. Para mí es un agradecimiento total a la comunidad que, aunque sea heterosexual, también me acepten y me cobijen.
Joaquín: Creo que no solo México, sino el mundo entero está renaciendo, está volviendo a tomar fuerza. Para mí es un paz total. Me siento feliz que las personas sean más fuertes y que estén protestando lo que sienten y lo que quieren de la manera más sana y limpia.
Aristemo les ha permitido hacer una obra de teatro y una gira musical. ¿Por qué decidieron tomar caminos separados?
Emilio: Yo llevo 5 años trabajando en mi proyecto musical y, gracias a que la gente me empezó a conocer, empezó a conocer mis canciones y a gustarles. Por eso me fui para el lado musical. La gente me pedía conciertos, presentaciones, nuevas canciones. Desde chiquito me ha encantado la música y los caminos se fueron dando así solos. Hoy estoy muy feliz de haber dado una gira por todo México y pronto llegar a Perú.
Joaquín: Aristemo fue un proyecto que agradezco. Cada uno de nosotros dio su granito de arena a la libertad, a lo que es la paz, la vida y luchar por nuestro bienestar. Vivimos el teatro musical y otras experiencias que se han convertido en tesoros en mi corazón.
¿Aristemo llegó a un fin con la telenovela o aún tiene futuro?
Emilio: Joaquín y yo tenemos muy claro que no somos un dúo. Eso fue una propuesta que, desde el principio, sabíamos que no iba a ser así. Él tiene su estilo y yo tengo el mío; y cada uno disfruta a su gente y a sus fans. Él tiene una parte de fans, yo tengo otra y mucha gente nos apoya a ambos. El público sabe disfrutar a cada uno con su personalidad diferente y, por eso, Joaquín está dentro del tour y estamos felices que sea nuestro invitado especial.
Joaquín: La carrera del artista es camaleónica, pero quién sabe, la vida puede dar sorpresas. De hecho, en la serie “Juntos, el corazón nunca se equivoca” hay algo por ahí. No sé, puede haber algo nuevo. A mí me encantaría que la historia de Aristemo volviera, pero quién sabe, no lo sé (risas). Lo cierto es que son personajes que viven en mi corazón y han marcado mi vida.
Llegan por primera vez a Lima en febrero. ¿Qué expectativas tienen del concierto?
Emilio: Por primera vez llegamos pa’ allá. ¡Qué otra cosa puedo pedirle a la vida que la música y que lo que me gusta sea lo que me lleve a conocer nuevos lugares! En esta gira “Perfect Tour” estamos dispuestos a dar el 100% y estamos preparando el próximo disco para el próximo año.
Joaquín: Estoy súper emocionado, porque nos vamos a conocer por fin con los fans de Perú. Yo lo llamo “conocer la naturaleza de Dios”, conocer lo que nos ha regalado.
Dato
Aristemo se presentará este sábado 8 de febrero a las 8 p.m. en el Centro de Convenciones Bolívar. Las entradas están disponibles en Teleticket.